El misterio de las tortugas muertas en Tarragona, Altafulla y La Pineda

Esta mañana, el cuarto ejemplar de Caretta Caretta fallecido llegaba a la punta del Racó. Preocupación entre los expertos por la llegada en 15 días de cuatro ejemplares en estado de descomposición y en un tramo de litoral tan pequeño 

16 abril 2021 19:20 | Actualizado a 20 abril 2021 16:44
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La presencia de tortugas marinas en las costas de Tarragona se ha convertido en estos últimos meses en interés social y mediático tras la llegada de hembras en busca de lugares tranquilos para desovar. El último caso, en La Pineda, del verano pasado fue de máximo interés por la insistencia de la hembra en venir una y otra vez a la playa para sus puestas.

Pero la alegría del desove y de la liberación de crías en octubre desde la misma playa, ha pasado a la tristeza de la llegada esta mañana del cadáver en avanzado estado de descomposición de un ejemplar adulto. Su descomposición impide, muchas veces hacer necropsias y demuestra que no ha fallecido recientemente, sino que el mar ha terminado dejando en la arena el cadáver sin rumbo de este animal.

Las causas de su  muerte no pueden intuirse a primera vista, puesto que no había señales externas en el ejemplar de Caretta Caretta de La Pineda que pudieran apuntar hacia una dirección u otra.

Pero la tristeza de un ejemplar fallecido se suma a la extrañeza y sorpresa de que no ha sido un hecho aislado en las costas de Tarragona. Es la cuarta que aparece en un tramo pequeño del litoral tarraconense comprendido entre Altafulla y La Pineda.

El primer ejemplar de tortuga llegó a la playa de L’Arrabassada de Tarragona en la tarde del domingo 4 de abril. El segundo cadáver de Caretta Caretta se encontró el día 15 en la playa de Tamarit, en el límite con Altafulla. El tercero precisamente en este municipio a la mañana siguiente a la altura de Botigues del Mar. Y el cuarto, hoy en La Pineda.

Solo en el ejemplar de Altafulla se encontró un plástico en la boca, lo que podría intuirse la causa de la muerte. Del resto, no se puede afirmar con rotundidad. Las tortugas son consumidoras de medusas y los plásticos confunden a estos animales que si los ingieren muchas veces terminan ahogadas y fallecen.

Desde el Gepec, Raúl Cendon, responsable del Projecte Tortuga, admite que sorprende y preocupa la llegada de cuatro ejemplares en pocos días de diferencia y en un espacio de litoral tan limitado.

De momento, tanto el Gepec como Agents Rurals de la Generalitat están documentando estos cadáveres, que si no pueden practicarse una necropsia deben reciclarse de forma adecuada.

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