Los trabajos para remodelar la travesía de la C-31 a su paso por Cunit y que tenga una funcionalidad urbana comenzarán en las próximas semanas.
Las obras no esperarán a pasar el verano como pidió ERC de Cunit para evitar afectar a la temporada estival. Tampoco habrá gratuidad de la autopista C-32 como planteó, también el partido republicano, para evitar posibles colapsos debido a las obras.
La Generalitat explica que las obras garantizarán la movilidad en todo momento y que en fines de semana o jornadas de mayor movilidad, podrán pararse.
Descarta que la autopista C-32 sea gratuita como vía alternativa a la zona de obras. La Generalitat reitera que la movilidad está garantizada y que levantar las barreras supondría un coste que pagar a la concesionaria y no está contemplado en el presupuesto.
Todo está apunto para transformar la C-31 por el centro de Cunit. La obra era esperada hace años tras varios anuncios y retrasos. El objetivo es pacificar la circulación por una vial por la que pasan más de 25.000 coches diarios en una trama urbana.
La actual carretera es un peligro ya que los vecinos deben cruzarla constantemente. La velocidad a la que circulan algunos conductores y la falta de iluminación ha motivado diversos accidentes, principalmente atropellos.
Los trabajos deben transformar la travesía. En un tramo de dos kilómetros habrá una nueva rotonda a la altura de la calle Montblanc, un carril bici bidireccional de 2 metros de ancho, y se ensancharán las aceras creando nuevas donde no hay, además de mejorar los pasos de peatones y los accesos desde las diferentes calles.
La nueva C-31 tendrá un parterre de un kilómetro que separe la dirección de los carriles de circulación para evitar que los vecinos puedan cruzar por cualquier lugar. También los carriles para coches serán más estrechos para intentar rebajar la velocidad.
Algunos pasos de cebra desplazarán y otros se mejorarán para que sean más visibles tanto en iluminación como alejando las zonas de aparcamiento. También habrá más señalización vertical y horizontal, además de balizamientos.
El proyecto reordena la canalización del tráfico y los accesos de los carriles laterales a la rotonda de la avenida Mediterrani, anulando los accesos directos. En la plaza Generalitat habrá una nueva entrada y salida a la plaza de la C-31. En la parada de bus se desplazará marquesina y ampliará la acera. Por su parte la pasarela de peatones sobre el torrente del Pedro se ampliará de los 0,90 metros actuales a los cuarto para que haya paso de peatones y bicicletas.
