La Costa Daurada no recibirá este otoño turistas del Imserso (Instituto de Mayores y Servicios Sociales). La primera fase del programa, que va desde principios de octubre hasta finales noviembre, está descartada debido al contencioso que mantienen los dos operadores que deberán gestionar estos viajes, Mundosenior y Mundiplan.? Las agencias no podrán empezar a vender los paquetes hasta al menos el 26 de octubre. Demasiado tarde, por lo que los cinco hoteles de Salou y el de Sant Carles de la Ràpita que acogen cada año a estos visitantes senior han decido cerrar. Los primeros turistas del Imserso no llegarán, por tanto, hasta la segunda fase del programa: de febrero a finales de mayo.
«Ya no estamos a tiempo para que vengan en otoño. Habitualmente, las reservas se cierran en septiembre y los primeros turistas del Imserso llegan después del puente del Pilar. Por estas fechas suelen estar ya aquí. Pero este año todavía no se han empezado a vender los viajes –el proceso dura varias semanas–», lamenta Xavier Roig, portavoz de la Associació Hotelera Salou-Cambrils-La Pineda.
Esta demora dejará a la Costa Daurada sin los aproximadamente 8.000 turistas senior que vienen cada año en esta primera fase –la estancia media es de una semana–. La tanda de otoño es, no obstante, la más floja: apenas representa el 15 o el 20% del total de visitantes del programa. El grueso se concentra en invierno, cuando además de los hoteles de Salou participarán otros de Cambrils y La Pineda.
Su ausencia supondrá la pérdida de trescientos puestos de trabajo durante este mes y medio. «Aparte de los jubilados que no podrán viajar, los más perjudicados son los empleados de los hoteles cerrados, pues este otoño no estarán dados de alta », comenta Roig.
Para los empresarios hoteleros no será tan dramático, asegura Roig: «Nosotros no nos ganamos la vida con el Imserso. Los precios son bajos y los ingresos nos sirven básicamente para cubrir gastos y pagar a los trabajadores. Tanto el turismo senior como el juvenil nos permiten alargar la temporada y fidelizar a nuestros empleados para que sean más profesionales».
De rebote, también saldrán perdiendo los bares y los comercios de la zona. «Los turistas del Imserso no gastan mucho, pero algo dejan siempre. Además, dan ambiente a Salou, que estos meses estará más vacío», añade el portavoz de la asociación hotelera de la Costa Daurada central.
«Vamos a notar la falta del Imserso. La temporada de trabajo será mucho más corta para los establecimientos, sus empleados, proveedores... Sólo quedarán dos hoteles abiertos en Salou e n invierno y habrá menos compras y, por tanto, menos ingresos», comenta Juli Vilaplana, presidente de la Associació 365 dies-Salou Vila Comercial.
Adjudiación compartida
¿Cuál es el origen de esta crisis? El Imserso adjudicó el pasado 21 de julio la gestión de los viajes a Mundosenior – la tiene desde hace 25 años– frente a Mundiplan que partía como la favorita en el concurso público con un ahorro de 22 millones de euros. El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales anuló el 11 de septiembre esta adjudicación tras admitir el recurso presentado por Mundiplan, que recurrió tras detectar «irregularidades».
El tribunal ordenó a la mesa del Imserso que valorará de nuevo las distintas candidaturas y esta propuso repartir los viajes para los dos próximos años entre los dos operadores: para Mundosenior las costas y el interior y para Mundiplan, las Islas Canarias y las Baleares. El Imserso ratificó esta decisión el 7 de octubre y dio a ambos quince días hábiles para presentar alegaciones. Si Mundosenior no recurre, los viajes podrían comenzar a venderse a finales de este mes. Si lo hace, el programa acumularía un nuevo retraso. Fuentes cercanas a esta agencia señalaron recientemente a Europa Press que solicitarán la vista del expediente y no descarta «cualquier acción, incluso judicial», una vez que sus abogados estudien la nueva situación.
Las mismas fuentes insisten en que este reparto obligará a los jubilados a viajar de madrugada y en peores condiciones dado el alto número de vuelos nocturnos (unos 1.600, más del 19%) y obligaría a desviar parte de los viajeros de Canarias a Baleares por la falta de plazas hoteleras.
El presidente del Patrotan Municipal de Turisme de Salou, Benet Presas, critica que es «una lástima que en otoño no haya turistas del Imserso en Salou por culpa de un problema administrativo . Hace tres años tampoco hubo, aunque entonces fue porque el Estado redujo la partida presupuestaria de este programa y redujo las plazas».
Presas, no obstante, confía en que el municipio pueda recuperar en invierno y primavera «las pernoctaciones que perderá este otoño, alargando un poco más la segunda fase o incrementando el número de plazas».
Se trata de un nuevo contratiempo en un año complicado a nivel turístico por el desplome del turismo de más del 50% del mercado ruso en la Costa Daurada.