La caída y posterior muerte este martes de un perro de la raza Beagle que perseguía a un gato cerca de la vías del tren en Torredembarra ha revelado un peligroso tramo de un camino usado por vecinos para pasear e ir en bici y que transcurre colgado sobre las vías sin protección. El alcalde señaló que de manera inmediata se revisará la titularidad de esa finca y a quién corresponde colocar una valla para evitar más desgracias.
Los primeros metros están vallados, pero dejan de estarlo y la caída a las vías es de unos 10 metros de altura. Además, el camino en esa zona apenas tiene un metro y medio de ancho. Es de tierra y pueden verse roderas por el paso de bicicletas o motos. Vecinos de la zona explican que es habitual ver pasar a niños, por lo que la ausencia de la valla es un riesgo.
En estos casos suele haber desencuentro entre Adif y los ayuntamientos, ya que el gestor ferroviario pide a los municipios que adelanten las obras para mayor agilidad.