El cartel de la Diada Nacional de Catalunya ha desatado una polémica, más allá de la estética que también permite opiniones para todos los gustos.
El cartel muestra un ‘escondido’ Casals que se intuye en fragmentos de su imagen y que sostiene una batuta rodeada de hojas. La presencia vegetal hace referencia a la frase que acompaña: Som fulles d’un mateix arbre, i l’arbre, és la humanitat. Una reflexión que hizo Casals.
También aparece un pajarillo que pretende recordar al Cant del Ocells y la explicación del violoncelista cuando destacó que los pájaros en su vuelo van diciendo paz, paz, paz.
Pero más allá de esos simbolismos y la presencia del catalán universal que defendió la catalanidad por todo el mundo plantando cara a las dictaduras y totalitarismos, el cartel ha activado un encendido debate.
Los críticos destacan la ausencia de simbología catalana más explícita. Principalmente la senyera, siempre presente en el cartel de la Diada. Hay quien plantea que debería estar la estelada y alguna reivindicación más combativa como la palabra Libertad en el 2017.
Incluso a través de las redes sociales s proponen modificaciones con la misma base:
La Generalitat pone a Pau Casals como referente de la Diada coincidiendo con el 50 aniversario de la concesión de la Medalla de la paz y el estreno del considerado como himno de las Naciones Unidas que compuso. Ese día Casals inició su discurso con el recordado I’m a catalan.
El cartel es obra de Mireia Serra, conocida en el mundo artístico como Lily Brick.
Las reacciones son de todo tipo desde el ex diputado de la CUP, Antonio Baños que dice «Y sobre todo, catalanes: en la Diada no molestéis ni hiráis sensibilidades. Somos hojas del árbol humanitario. Somos buenas personas sin banderas ni fronteras. Si queréis reivindicar cosas catalanitas, poneos hojas».
Lluís Llach comparte un tuit que señala que «Faltan tres días para la Diada Nacional de la Humanidad».