La Policía de Andorra está investigando la muerte de un vecino de Roda de Berà de 41 años en Arinsal. El hombre estaba de turismo en la zona y apareció muerto el pasado miércoles en el río que atraviesa la población, situada a 1.450 metros de altura y dentro de la parroquia de la Massana.
Los servicios de emergencias recibieron el aviso por los alrededores de las 11 horas de la presencia de un cadáver en el río Arinsal, a unos 200 metros del telecabina que puerta a la estación de esquí.
Todo los indicios apuntaban que se trataba de un turista que se alojaba en un hotel próximo, un extremo que se ha confirmado con la autopsia y la comparativa de las huellas dactilares, según la policía andorrana, que ha contado con colaboración de la Guardia Civil y la Policía Nacional española.
«El intercambio de datos ha permitido a los investigadores confirmar la identidad del difunto», ha corroborado la Policía de Andorra, que continúa ahora recopilando información para aclarar las circunstancias de la muerte del vecino de Roda de Berà y averiguar si hay indicios criminales o fue accidental.
Según publica este sábado el Diari d’Andorra, la víctima hacía una estancia de tres días en el Principado para esquiar y tenía que volver el jueves a Catalunya. La familia tuvo una última conversación con el difunto el mismo martes por la noche.
El padre y el hermano del hombre muerto se han desplazado este sábado en Andorra para hacer los trámites de repatriación del cuerpo y recibir más información por parte de la policía.
