Cómo ir de compras e intercambiar regalos

La Navidad son fiestas con un elevado grado de consumo. Es habitual presenciar o encontrar en medio de las recurrentes escenas de comercios atestados de clientes en busca del mejor regalo en el último momento. Una situación que choca este año frontalmente con las medidas más elementales de precaución frente al coronavirus.

Por ello, es más recomendable que nunca huir de las aglomeraciones de las zonas comerciales y recurrir todo lo que se pueda a las compras por internet. Lo dice la OMS: «Evitar los centros comerciales si en ellos hay mucha gente, intentar acudir a las tiendas en las horas menos concurridas y hacer uso del comercio electrónico». En este sentido, ya incluso el pequeño comercio se ha sumado a la venta online. Aprovechemos estas ventajas para evitar en la medida de lo posible las aglomeraciones.  

Por su parte, las autoridades sanitarias españolas añaden otro consejo, para el que todavía hay tiempo, aunque no mucho: Organizar las compras con antelación suficiente para poder hacerlas antes de que se produzcan aglomeraciones en las tiendas y en las calles. En todo caso, los clientes de centros comerciales deberán someterse a los aforos previstos.

Y como en el resto de situaciones, tengan cuidado con llevar todos mascarilla y llevarla bien puesta. 

El ritual de intercambiarse los regalos

Igual de importantes son las precauciones a la hora de comprar los regalos que de entregarlos. Y es que no hay Navidad sin regalos y ésta tampoco esta debería serlo. La Organización Mundial de la Salud asegura que, con una buena higiene de manos, el riesgo de que el virus se transfiera a través del envoltorio de un regalo es mínimo.

Así que no habría mayor problema en que cada uno abra su regalo, aunque eso sí, si estamos en un local interior el reparto o intercambio de los regalos no debería ser una excusa para alargar mucho más la reunión.