Los mejores libros sobre arte de 2021

Echamos la vista atrás para repasar las publicaciones que han visto la luz durante este 2021 y que nos han mantenido cercanos a nuestros artistas y obras favoritas

26 diciembre 2021 22:21 | Actualizado a 27 diciembre 2021 19:01
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“Cultura de la cancelación” quizás haya sido uno de los conceptos más escuchados este año en el debate que sur- ge de la confusión entre el artista y el valor de sus creaciones. Gisèle Sapiro, socióloga discípula de Pierre Bourdieu y reputada intelectual en Francia, nos invita a reflexionar sobre la separación de la obra y el artista, apostando por la discusión y la crítica como soluciones mucho más fruc- tíferas que el borrado instantáneo. Un libro necesario para ahondar en las disputas sobre las relaciones entre la moral y el autor, que parte de casos actuales, como la polémica entorno al premio César otorgado al cineasta acusado de violación Roman Polanski, así como imprescindible para conocer los conceptos esenciales de un con- flicto clave dentro de las “guerras culturales”.

Es una pena que la editorial barcelonesa Terranova no haga segundas ediciones porque fueron muchos los que se quedaron sin su ejemplar de “Agua y Jabón” de la periodista Marta D.Riezu. A pesar de su larga carrera, Riezu empezó a ser más conocida gracias a su cuenta de Instagram; un espacio de pequeñas y elaboradas cápsulas de sabiduría en el que la autora da rienda suelta a sus vastos conocimientos sobre moda y arte, salpicados de aforismos de cuño propio y curiosísimas anécdotas. Por suerte, Anagrama la rescata de nuevo para uno de sus brevísimos ensayos, esta vez exclusivamente sobre moda y sobre el inusual y refrescante punto de vista de esta excelente es- critora que no deja puntada sin hilo. 

 

«Expresarse necesita una razón», escribe Ai, «pero expresarse es la razón”. El artista chino Ai Weiwei lleva décadas contribuyendo al debate sobre la democracia y la libertad artística con sus obras. Su última aportación ha sido este libro de memorias en el que ofrece una historia personal de sus continuas batallas con el estado represivo chino, y su desafiante dramatización de lo que es la libertad creativa. A pesar del subtítulo, no son exactamente unas memorias, ni siquiera una biografía al uso, más bien una obra de arte experimental que bien podría ser una pieza más en su corpus artístico.

 

Nos la redescubrió el Guggenheim de Nueva York con una descomunal monográfica que fue récord de asistencia en 2018. Luego vino el documental de Halina Dyrschka que pasó recientemente por el festival de documental de arte contemporáneo Dart 2021. Y, durante este lapso de tiempo se han ido publicando biografías, monografías y catálogos entre otros. Este año, la casa editorial sueca Bokförlaget Stolpe sigue con su monumental empresa de publicar el catálogo razonado completo de la artista publicando el quinto volumen, dedicado al uso que Hilma af Klint hizo de la botánica y la ciencia para elaborar la visión espiritual que inspirará sus obras abstractas.

 

El escritor Julian Barnes, que ya nos deleitó con el repaso de sus artistas favoritos en “Con los ojos bien abiertos”, pone el foco esta vez en un cuadro del reputado pintor estadounidense John Singer Sargent, célebre por sus retratos de la alta sociedad. La pintura se titula “El Dr Pozzi en casa”; un hombre joven, atractivo y seguro de sí mismo que posa con una túnica escarlata de cuerpo entero. El hombre es un conocido ginecólogo de la época con reputación de mujeriego. Partiendo del cuadro, Barnes se propone descubrir más sobre Pozzi, y luego construye en torno a él, a través de una densa red de conexiones y relaciones, un estudio envolvente de un trozo del pasado francés.

 

Los primeros años del siglo XX fueron de una extraordinaria fecundidad para la imagen. Unos años que fueron testigos del perfeccionamiento del medio fotográfico, y del nacimiento de la imagen en movimiento, gracias al cinematógrafo. Hechos que contribuyeron a un periodo de innovación que supuso un pico creativo tanto en la historia de la fotografía como en el campo del arte en general. Si hay una colección que capta ese espíritu es la de la Colección Thomas Walther del MoMA. En este volu- men, que va del 1900 al 1940, se recoge la obra de brillantes fotógrafos que ejercían a ambos lados del Atlántico en el periodo de entreguerras y que marcaron las pautas de la disciplina.

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