El movimiento del cuerpo resiste al paso del tiempo

Reus. Este fin de semana, sábado y domingo se estrena en el Teatre Bartrina el espectáculo ‘37 Horitzons’, inspirado en el poemario de Gabriel Ferrater.

17 septiembre 2021 17:03 | Actualizado a 17 septiembre 2021 20:12
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La persiana, no del tot tancada, com un esglai que es reté de caure a terra, no ens separa de l’aire. Mira, s’obren trenta-set horitzons rectes i prims, però el cor els oblida. Sense enyor se’ns va morint la llum, que era color de mel, i ara és color d’olor de poma. Que lent el món, que lent el món, que lenta la pena per les hores que se’n van de pressa. Estos primeros versos corresponden al poema Cambra de la tardor del reusense Gabriel Ferrater (1922-1972), y que han inspirado a Miriam Valero, Drian Hernández, Hector Puigdomènech, Ruth Prim y Ariadna Lussà a crear el proyecto 37 Horitzons, con el que han ganado el Projecte Bartrina 2021 convocado por Reus Cultura. «El Projecte Bartrina es muy necesario, ya que proporciona una residencia que contribuye a la investigación cultural, algo que no se da con facilidad hoy en día», asegura Ariadna Llussà.

Referentes de la danza contemporánea y de las danzas urbanas, a través del movimiento del cuerpo interpretan «el paso del tiempo material, es decir, el reloj que sigue funcionando sí o sí, aunque nosotros no queramos; cómo es el envejecimiento de nuestra piel y nuestra alma; y también el porqué del suicidio que es un tema tabú en nuestra sociedad y que sigue pasando desapercibido ante nuestros ojos», dice Ariadna Llussà.

 

 

Los intérpretes empezaron a trabajar el pasado mes de julio. «En una primera instancia nos centramos en la investigación sobre el poemario de Gabriel Ferrater, y sobre los sentimientos y sensaciones que queríamos trasmitir al espectador, así como el espacio sonoro que queríamos que nos rodeara», explica la intérprete, quien destaca que «el espectáculo se acompaña de música muy diversa, desde melodías urbanas hasta otras clásicas y contemporáneas». La escenografía, describe Ariadna Llussà, «es sencilla pero acogedora, ya que hay un sofá emblemático en el que suceden muchas cosas y una luz de pie como elemento material de la reflexión del pensamiento y de lo que sentimos en nuestro interior».

En este sentido, la misma es consciente de que las carreras artísticas también tienen el tiempo contado. «Al final, como bailarín tu cuerpo trabaja como el de un deportista de élite y por ello vivimos con la urgencia de hacer todo lo que queremos en el presente», asegura Ariadna Llussà.

Por todo ello, 37 Horitzons invita a «vivir la vida en plenitud e intentando encontrar los pequeños momentos de luz, aunque en ocasiones nos parezca difícil».
 

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