En la receta de hoy vamos a utilizar dos productos de huerta que contrastan por su colorido: el blanco de la coliflor y el anaranjado de la calabaza. Mezclados darán como resultado una combinación de texturas y sabores suaves que gustará a todos.
La propuesta de esta preparación nos llega a través de Vivi, una mamá de dos niños a los que ha enseñado el valor de las verduras y hortalizas, incorporándolas con frecuencia en la dieta familiar. Nos habla de su afición a la horticultura y a la jardinería y, siempre que puede, prefiere cocinar con productos de mercado y de proximidad.
Jugando con formas y colores ha puesto en su mesa alimentos saludables como los que va a preparar hoy que ponen en valor los productos naturales.
Conocemos muchas de las características de la calabaza, sus múltiples usos culinarios que la hacen perfecta tanto en repostería en forma de mermeladas, pasteles y dulces, como en la cocina tradicional y en la nueva cocina que la ha integrado con carnes, pastas, salsas, ensaladas... Sus semillas naturales o tostadas se consumen como un rico aperitivo y con la pulpa se prepara un rico cabello de ángel.
Pariente de pepinos y melones, constituye un plato de temporada y de proximidad que nos garantiza un alimento sano y rico en vitaminas y minerales. En nuestra receta el sabor dulce y suave de la calabaza combina muy bien con la coliflor.
Coliflor, hortaliza que se cultiva muy bien en la zona mediterránea, de variados colores, blanca, verde y violeta, siendo la blanca una de las variedades más consumidas. De sabor dulce y suave, fuente de vitaminas del grupo B, nos aporta fibra, potasio y fósforo, tiene propiedades diuréticas, buena para la hipertensión.
Calabaza y coliflor que nuestra invitada suele comprar en su mercado de confianza en paradas de fruta y verdura como Gustum, Filla de la Patro o Arrels.
Como siempre, en una agradable reunión, compartimos con nuestra invitada el placer de cocinar.
Ingredientes para 4 personas
l 500 gr de calabaza cortada
l 1 coliflor mediana
l 3 zanahorias
l 1 ajo
l 500 ml de caldo de verduras
l 50 ml de aceite de oliva virgen
l Sal
l Pimienta blanca molida
l Un par de cucharadas de nata o requesón
l Trocitos de pan tostado
l Perejil
l Tomillo o romero
Preparación
En una sartén rehogamos la cebolla y el ajo picados bien finos. Retiramos y reservamos
En el mismo aceite rehogamos 3-4 minutos la calabaza cortada y las zanahorias. Este tiempo será suficiente, ya que acabaremos la cocción con el caldo de verduras. Retiramos y en la misma sartén rehogamos la coliflor, si es necesario echamos un poco más de aceite.
En una cazuela incorporamos todos los ingredientes que hemos rehogado y echamos el caldo de verduras para que hiervan hasta comprobar que han quedado en su punto. Salpimentamos.
Cuando haya enfriado añadimos la nata o el requesón y con la ayuda de un robot trituramos para que quede una crema no demasiado líquida.
Presentamos con el queso rallado, el pan tostado y un poco de perejil, tomillo o romero. Un plato sencillo, con mucho sabor y fácil de preparar.
¡BUEN APETITO!
