El Reus, entre el peso de su historia y su debilidad económica

La eliminación en los cuartos de final de la Copa y en la fase de grupos de la Champions, aleja al equipo de las grandes potencias continentales

10 marzo 2019 18:53 | Actualizado a 10 marzo 2019 19:01
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

En el Dragao Caixa, el Reus Miró cerró su particular idilio con Europa, después de dos cursos consecutivos en el foco de la Final Four, entre las cuatro mejores escuadras continentales. En la edición de 2017, los rojinegros campeonaron en Lleida. Este fin de semana, en Oporto, los de Jordi Garcia se quedaron en la fase de grupos, en una última fecha decisiva, con la clasificación pasando por un escenario imponente como el portugués. Compitió el equipo pero no le dio para más. Tampoco le ayudaron las ausencias de Bancells y Cristian, mermado y apto para escasos minutos. El Lodi, campeón italiano, ocupó el lugar que dejó el Reus en los cuartos de final.

Justo 15 días antes, el Pavelló Olímpic vivió una noche de brujas inesperada. El Reus cedió ante el Lleida en los cuartos de final de la Copa que la ciudad había organizado con el entusiasmo de costumbre. Los rojinegros se toparon con la exhibición defensiva de un rival teóricamente menor y confirmaron una eliminación cuanto menos decepcionante. La Copa y la Champions han evidenciado que ahora mismo el Reus se encuentra lejos de las mejores potencias europeas, algo que no había ocurrido en los dos precedentes anteriores.

Existen razones de peso que explican el por qué el plantel ha quedado debilitado. Del quinteto titular campeón de Europa en 2017 no queda ni rastro. Pedro Henriques (Benfica), Matías Platero (Sporting), Albert Casanovas (Benfica), Raúl Marín (Sporting) y Marc Torra (Oliveirense) conviven en el lujoso hockey portugués, con contratos muy superiores y en clubs profesionalizados y repletos de recursos. Disfrutan del poder de las grandes potencias, la mayoría de ellas clubs de fútbol para los que invertir un millón de euros en la sección de hockey no resulta un esfuerzo extra. Es más, Casanovas, Platero y Marín salieron del Reus previo paso por caja. El club cobró sus respectivas cláusulas de rescisión, alrededor de 50.000 euros por jugador.

Reforma inesperada
El problema se agrandó este pasado verano, cuando el Reus necesitó reformar el equipo a contracorriente, con las bajas inesperadas de Marín y Casanovas. Torra ya había anunciado su marcha mucho antes.  La dirección deportiva invirtió en jugadores potencialmente interesantes como Marc Julià o Carballeira, aunque sin el caché ni el status de los actores que perdió. Completó la plantilla con Cristian Rodríguez y una inesperada aparición del veterano portugués Tiago Rafael, lejos de ser el jugador que fue. Permanecen del pasado el arquero Ballart, más Joan Salvat y Àlex Rodríguez. Es decir, el Reus abarató el coste de su equipo casi a la mitad, aunque eso deportivamente le ha comportado peores registros.

A nadie se le escapa que la entidad de la calle Gaudí no vive un momento económico dulce. Su tesorería resulta más bien escasa y la liberación de grandes contratos como el de Torra, Marín y Casanovas ha supuesto cierto alivio. En el mismo Reus se habla constantemente de que este es un año de transición para su equipo de hockey, aunque el peso de la historia de la sección no permite demasiadas licencias. 

Aunque resulte una verdad indiscutible que ahora mismo el Reus no dispone de argumentos suficientes para hacer frente a todo el armamento de Barcelona, Porto, Sporting, Benfica y Oliveirense, anda obligado a reconstruir un equipo que, por lo menos, pueda regresar a una semifinal europea. Se lo demanda la tradición y la exigencia que siempre ha distinguido a la sección. Caer en el conformismo y la resignación no está permitido. Ni tampoco usar como coartada que se trata de un año de transición cuando el Lleida te elimina en cuartos de Copa del Rey. No va a acorde con la tradición del Reus.

Comentarios
Multimedia Diari