Jeremy Alcoba: 'Este curso era todo o nada'

No fue fácil y nunca le regalaron nada, pero Jeremy Alcoba ya puede presumir de ostentar el título de Moto3 en el Mundial Junior. El del ebrense ha sido un año digno de reconocimiento y es que ha subido al podio en 10 de las 12 carreras de la temporada, consiguiendo tres victorias, tres segundos puestos y tres terceros.

Además, remató el año consiguiendo el título a lo campeón al ganar la primera manga de Valencia, la que le proclamaba campeón del Mundial Junior.

Como recompensa al arduo trabajo, Alcoba correrá la temporada 2020 de forma permanente con el Team Kömmerling Gresini en el Mundial de Moto3.

Este fin de semana competirá con el mismo equipo sustituyendo a Gabriel Rodrigo en la última prueba del Mundial que se celebra a partir de hoy en el Circuit de Valencia y, de esta manera, comenzará ya a preparar la próxima temporada.

¿Qué lectura hace de la temporada?

Creo que ha sido perfecta, luchada y bonita porque al final hemos ganado el campeonato y todo se resume en eso. Hace un año estaba llorando porque no sabía qué iba a hacer en 2019 y terminar ganándolo ha sido increíble. Comencé un poco asustado por el cambio de Honda a Husqvarna, pero desde el principio fui rápido gracias a la ayuda del equipo.

¿Cómo afrontó la carrera que le podía dar el título?

La afronté con calma porque la pista estaba fría y hacía mucho viento. Hasta las últimas cuatro vueltas estaba pensando en el campeonato, pero luego ya me centré más especialmente en ganar la carrera.

¿Qué fue lo primero que se le pasó por la cabeza al cruzar meta?

Estaba super feliz, es algo por lo que he luchado y conseguirlo ganando fue increíble. Recordé que he llorado muchas veces y no sabía qué iba a hacer este año, todos esos recuerdos buenos y malos se te pasan por la cabeza. Luego la celebración con mi padre y mis amigos a pie de pista fue super especial.

¿A quién le dedica el título conseguido?

Sobre todo a mi familia porque siempre ha estado ahí desde que era pequeño, en las buenas y en las malas. También va para mi equipo por el trabajo que ha hecho y lo bien que se ha portado conmigo, ha estado apoyándome y confiando en mi.

Tuvo nuevo equipo este año y parece que el cambio de aires le ha sentado bien.

Esta temporada era todo o nada y he sabido mantener la calma. El año pasado no acababan de salir los resultados, estaba un poco bloqueado así que cambiar de moto y equipo me sentó bastante bien. Lo afronté con ilusión y muchas ganas de luchar por el campeonato y estar al año siguiente en el mundial.

Por fin cumplirá el sueño de correr en el mundial. ¿Cómo ha sido el camino hasta llegar?

Ha sido más de llorar que de satisfacción porque no me han regalado nada. Económicamente tampoco ha sido fácil así que estoy super agradecido a mi familia porque lo han dado todo por mí y a Gresini que ha confiado en mi para 2020.

¿Cuál es la mayor diferencia entre la Husqvarna del FIM CEV y la Honda del Mundial?

La Husqvarna es más corta y puedes atacar más la frenada hasta dentro mientras que la Honda es más lineal. La Honda es más larga y en las curvas rápidas se mueve menos y ahí la Husqvarna sufre más.

Al haber corrido aquí hace una semana, ¿puede tener ventaja respecto a sus rivales?

Sí y no porque he estado cuatro días con Husqvarna y ahora correré con una Honda. Sí que conozco el circuito, pero la moto es muy distinta y tengo que cambiar el chip.

¿Lo tomará como preparación para 2020?

Sí, será una pretemporada adelantada para conocer mejor la moto, el equipo y preparar el año que viene.

¿Qué objetivo se marca para 2020?

El objetivo es aprender. Firmaría acabar en el TOP10 a final del año, ser el mejor debutante de la temporada y luchar por el podio en alguna carrera.

Será el primer tarraconense en el mundial en 10 años desde Joan Olivé, debe ser un orgullo.

Sí, sobre todo por representar a mi pueblo, Jesús. He dado una lección demostrando que puedes triunfar aunque seas de un pueblo pequeño que no conoce nadie.