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Lleno hasta la bandera. El lunes a las 19.00 horas en las gradas del Nou Estadi no cabrá ni un alfiler. El estadio del Nàstic estará a rebosar de seguidores granas para animar a su equipo en el partido más importante de la temporada.
El derbi ante el CF Reus es un partido único. El primero de Segunda división en el feudo grana, tras el 1-0 de la ida. Un encuentro que si ya de por sí levantaba expectativa, la situación en la tabla clasificatoria, con los dos equipos separados únicamente por un punto y en plena lucha por la permanencia, convierte el partido en un duelo casi de vida o muerte.
Los seguidores granas lo saben y por este motivo han acudido en masa a las oficinas del club para hacerse con una entrada. Los socios tienen su acceso incluido en el carnet y además han dispuesto de una promoción doble de 2x1 para disfrutar el encuentro bien acompañado de familiares y amigos.
Las pocas entradas que quedaron para los no abonados se agotaron en cuestión de horas. El miércoles, visto el bien ritmo de la venta de localidades, decidió abrir las dos pastillas centrales de la Preferente Superior. Las otras tres están cubiertas por lonas publicitarias que no pueden retirarse por cuestiones de convenio y también de seguridad, puesto que las obras que se están llevando a cabo en los accesos al estadio no permiten ocupar la capacidad total de la grada alta. Igualmente, esas 1.421 entradas de más se agotaron en 48 horas.
El CF Reus también ha vendido en pocas horas las 355 entradas que disponía para sus seguidores. Estarán ubicados entre el córner de Gol Mar y Preferente.
Motivación máxima
La importancia del partido ha hecho que Orgull Grana y Furia Grana se hayan unido para convertir Gol Nord en un infierno. Las dos peñas juveniles han realizado un video promocional del partido que culmina con una imagen potente. Casi una treintena de bengalas iluminan el anochecer tarraconense desde la Punta del Miracle para dar la bienvenida al Reus: “Benvinguts a Tarraco, Benvinguts a la capital”.
