Nàstic, a buenas horas

Victoria estéril del Nàstic ante el Mallorca de Vicente Moreno (2-1) con un final en suspense con dos goles en el tiempo añadido. Golazo de José Kanté

11 mayo 2019 17:55 | Actualizado a 12 mayo 2019 16:52
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El Nàstic estrenó la condición de equipo de Segunda B con una victoria del todo insospechada. Nadie esperaba que el conjunto de Enrique Martín pudiera sorprender al Mallorca de Vicente Moreno, arropado con más de medio millar de seguidores y en plena lucha por el play-off de ascenso. Sucedió, con un golazo de Kanté en el último minuto, ante la incredulidad de una afición local que tuvo la sensación de haber visto en 90 minutos lo que sus jugadores no le han ofrecido en todo el curso. ¿Ahora?, se preguntaba más de uno que buscaba una respuesta legítima en la liberación que siente el futbolista cuando no compite por un objetivo más allá del duelo que tiene ante sí.

Una hinchada que también necesita estímulos. Primero para desplazarse hasta el Nou Estadi un sábado a la hora de la siesta y después, ubicados ya en su asiento del feudo grana, para animarse a seguir apoyando el equipo.

En lo primero ayudó la presencia de Vicente Moreno. Uno de los mejores entrenadores de la historia del club regresaba al Nou Estadi por primera vez desde su marcha. Lo hacía al frente de un Mallorca, fiel reflejo de ese Nàstic que ascendió a Segunda B (2014-15) y que rozó con los labios la miel de Primera (2015-16).

Al entrenador valenciano le vino muy bien confiar en jugadores que llevaron a la práctica su metodología de trabajo e idea de fútbol en Tarragona para repetir en Mallorca. Xisco Campos, Lago Júnior o Reina han vuelto a recorrer el mismo camino con la camiseta bermellona que antes hicieron con la grana. Los tres estuvieron en el once balear de partida.

En cuanto a los estímulos sobre el césped, se espera que procedan de jugadores con recorrido en el Nàstic. Luego el futuro es impredecible, pero como mínimo exista la posibilidad de que continúen. Esa esperanza de tiempos mejores la ofrecieron básicamente dos jugadores: Viti y Pol Valentín.

El primero tuvo osadía para discutirle la medular a Salva Sevilla y Marc Pedraza. Y lo consiguió en muchos momentos en los que expresó detalles de un talento descomunal. Hace falta canalizarlo mejor y pulirlo para convertir al de Mataró en un líder.

Con Pol Valentín y sus incursiones por el carril diestro, que recordaba a los que hacía su hermano Gerard cuando Moreno dirigía al Nàstic, surge la duda de si no ha sido infravalorado durante toda la temporada. Lástima su lesión. Fue el constante puñal que descompuso a los bermellones. Rompió en el esquema defensivo del Mallorca tanto por el exterior como en diagonal. Les hizo dudar sobre cómo cerrarlo y abrió aún más las costuras baleares. Y es que a Vicente Moreno nunca se le dio bien el sistema de tres centrales y dos carrileros. Hay momentos que parece tener todo bajo control, como a él le gusta, e incluso tienen la opción de adelantarse, pero después se le descontrola en un instante.

Lago Júnior se plantó ante Becerra pero le tiró al cuerpo. Más clara fue la de Aridai. El canario estrelló el balón al palo y Salva Sevilla cruzó en exceso tras una buena jugada colectiva. Daba la sensación que el gol balear estaba al caer. Pero un centro de Abraham que golpeó a Xisco Campos en el brazo abrió un hueco en la consistencia mallorquina. Uche echó fuera el penalti y enfadó a los aficionados granas. El delantero no encajó bien los gritos críticos y cuando dos minutos después remataba al fondo de la red, en lugar de celebrar el tanto con sus compañeros se encaró con los seguidores apostados tras la portería. Una reacción que añade más leña al fuego y empeora la relación entre plantilla y afición con muchas jornadas de convivencia aún por delante. Para el Mallorca, el primer tiempo pudo ser aún peor si el poste no hubiera repelido el tiro de Noguera.

El segundo tiempo jugaba a favor del Nàstic. Los baleares iban a contrarreloj. Necesitaban ganar. Por puntos y porque una derrota ante un equipo descendido suele ser difícil de encajar. Tanto como que un conjunto sea capaz de mostrar más carácter y acierto cuando matemáticamente es de Segunda B que mientras competía por la permanencia.

La defensa tarraconense trataba de resistirse a los intentos visitantes de igualar el choque. Salva Sevilla lo intentó con una falta muy ajustada. El gol visitante llegó en el tiempo extra. Abdón se revolvió desde el suelo y anotó el 1-1. Pero el fútbol estas últimas semanas está exhibiendo su esencia ilógica y apasionante a partes iguales. José Kanté en un arrebato de ‘killer’ soltó un obús cruzado que dio la victoria al Nàstic.

FICHA TÉCNICA:

(2) NÀSTIC. Becerra, Pol Valentí (Iván López, 65’), Djetei, Noguera, Mikel, Abraham, Viti, Imanol, Thioune (Javi Márquez, 76’), Luis Suárez (Kanté, 70’) y Uche.

(1) RCD MALLORCA. Reina, Sastre, Xisco Campos, Valjent, Salva Ruiz, Aridai (Stoichkov, 78’), Salva Sevilla, Pedraza, Leo Suárez (Abdón, 46’), Budimir (Álex López, 67’) y Lago Júnior.

Goles. 1-0, Uche (42’); 1-1, Abdón (90’); 2-1, Kanté (94’).

Árbitro. Domínguez Cervantes (C. andaluz). Amarilla para Abraham, Uche, Thioune, Noguera, Viti, Becerra y Xisco Campos, Lago Júnior

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