Vuelve Achille Emaná

El Nàstic echó en falta a Achille Emaná. No sería uno de los mejores jugadores de la Segunda división, sino lo hiciera. Cualquier equipo que se preste a encajar en sus filas a una de las grandes figuras está sujeto a nostagiarlas cuando no juegan. Emaná es un desatascador. Un factor desequilibrante. Puede estar desconectado durante fases exageradamente largas del partido, que en cuanto engancha una pelota y la dota de lucidez todo cambia a su alrededor.

El camerunés ejerce un influjo temeroso en los oponentes. Concentra miradas y esfuerzos y ello otorga ciertas libertades al resto de atacantes.

En Palamós Achille Emaná se quedó en la grada. Una pequeña elongación en el isquiotibial derecho le tuvo a raya durante toda la semana. Moreno desechó el riesgo con el camerunés. Prefirió guardarlo para otras finales. Como la del domingo ante el Mirandés, a las 17.00 horas, en el Nou Estadi. Emaná ya está recuperado. El lunes entrenó junto con el resto de jugadores no convocados y hoy se espera que pueda completar la sesión sin mayores problemas.

Pablo Marí también entrenará sin problemas. El central valenciano se lesionó en Huesca hace dos semanas. La misma lesión que Achille, aunque algo más fuerte. El futbolista se ha perdido los dos últimos partidos, ante Oviedo y frente al Llagostera. El lunes sólo se perdió una parte del entrenamiento. Hoy, igual que Emaná, entrenará junto con el resto del equipo sin mayores problemas.

Mientras que el camerunés tiene muchos números de regresar al once de inicio contra el cuadro burgalés, Pablo Marí lo tendrá más complicado. En su ausencia Sukuzi y Molina se han hecho fuertes en el eje de la zaga. Pese al error del japonés en el gol ante el Llagostera –Natalio le pilló la espalda– el rendimiento de la pareja está siendo espectacular y Vicente Moreno podría seguir confiando en ellos de cara al próximo partido.

La enfermería del Nàstic queda ahora mismo vacía. Vicente Moreno puede contar con la totalidad de la plantilla. Se arrastran molestias, como Aburjania en el tobillo, pero todas ellas relacionadas con el desgaste de la temporada.

Cuatro apercibidos

El entrenador del Nàstic no tiene para este domingo ni lesionados, ni tampoco sancionados. Aunque sí que hay cuatro futbolistas apercibidos de sanción. El propio Achille Emaná lleva un mes y medio jugando al filo. Ha visto nueve amarillas, a una del segundo ciclo. La última tarjeta que vio el camerunés frente a la Ponferradina en el Nou Estadi. En la misma situación está Jean Luc. El extremo africano vio la novena cartulina frente al Córdoba y está a una del descanso obligatorio.

Otros dos jugadores del Nàstic están a una amonestación de la sanción. Palanca y Juan Muñiz tienen cuatro tarjetas amarillas. Si ven una más frente al Mirandés se perdería el partido del sábado 30 de abril a las 18.00 horas, en el Juegos Mediterráneos de Almería.