Juntos o por separado. En partidos trabados o abiertos. Por delante o por detrás en el marcador. Da igual el contexto, porque el Nàstic de Tarragona cuenta este curso con una delantera que siempre aparece. Pablo Fernández y Antoñín Cortés no solo aportan goles, también ofrecen presencia, trabajo y confianza. Su rendimiento permite al equipo grana soñar en grande.
En verano ya se intuía que el Nàstic tendría uno de los mejores ataques de la categoría, y los meses lo han confirmado. Cuesta encontrar una pareja de delanteros más efectiva que la que tiene entre manos Dani Vidal. No es casualidad que este sea el año más goleador del conjunto tarraconense en su historia en la Primera RFEF. Con una dupla así, los récords están al alcance.
Entre el asturiano y el malagueño suman 18 goles esta temporada. Una cifra imponente que confirma que las buenas sensaciones ofensivas del equipo ahora también tienen respaldo numérico. Su influencia en el juego ha sido siempre total, incluso cuando no marcaban con tanta facilidad. Dani Vidal nunca ha dudado de ellos y ha cultivado, con hechos y palabras, la confianza que cualquier delantero necesita.
En la victoria ante Unionistas, Pablo Fernández reapareció tras dos partidos de ausencia y lo hizo a lo grande: marcó en la primera que tuvo y alcanzó los nueve goles que ya tenía Antoñín. El malagueño, pese a no ver puerta, volvió a firmar un gran encuentro. Con esos nueve tantos, triplica los registros que logró el curso pasado en el CD Lugo, mostrando una versión estelar en su primer año de grana.
Los 18 goles entre ambos suponen una cifra sin comparación en las últimas temporadas del Nàstic. El año pasado, Pablo y Godoy anotaron 15 goles entre los dos, aunque el canario llegó en invierno. Hace dos campañas, Pablo solo marcó cuatro goles y Guillermo Fernández nueve. En la 2021-2022, Pablo firmó cinco tantos y Dani Romera siete, también llegando en el mercado invernal. Nunca antes el asturiano había alcanzado estos registros como grana.
La comparación con el resto de delanteras del grupo I de la Primera RFEF también deja en buen lugar al Nàstic. Ninguna otra dupla de delanteros centros ha anotado más goles. Hay parejas con más tantos, pero con matices. En la Cultural Leonesa, Chacón (10) y Justo (13) suman 23, pero Chacón no es punta. Lo mismo ocurre en el Barakaldo, que acumula 22 goles entre Sannadi (11, ahora en el Athletic) y Pablo Santiago (11), siendo este último un extremo.
En el Andorra, Lautaro y Manu Nieto suman 16 goles (ocho cada uno); en la Ponferradina, Costa y José Luis Cortés totalizan 14. Solo el Arenteiro iguala los 18 goles con Baselga (11) y Enol (7), ambos delanteros puros.
Con esta versión de Pablo Fernández y Antoñín Cortés, el Nàstic no solo ha encontrado el gol, también la regularidad y una sociedad ofensiva que aparece cuando más se necesita. En una liga donde cada detalle cuenta, tener dos atacantes que garantizan tanto es un privilegio. Soñar está permitido, y con esta delantera, aún más.
goles suman los dos delanteros del Nàstic juntos, una cifra espectacular