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En octubre o incluso dentro de septiembre, según decida finalmente el Gobierno, subirá el salario mínimo interprofesional (SMI), situado actualmente en 950 euros al mes repartidos en 14 pagas. El incremento –sea el que sea puesto que la horquilla que maneja el Ejecutivo oscila entre los 12 y los 19 euros– no servirá para reparar la fuerte pérdida que acarrea a lo largo de este año el colectivo de trabajadores que menos cobra del mercado laboral español y que está formado por más de 1,5 millones de empleados, según estimaciones del Ministerio. CCOO eleva la cifra hasta los dos millones, al incluir a quienes trabajan a tiempo parcial.
La escalada sin freno de la inflación, debido al encarecimiento de la electricidad y de los carburantes, está impactando fuertemente en los bolsillos de los más vulnerables. Una persona que esté cobrando el SMI ha perdido en lo que va de año más de 213 euros, según la inflación media prevista para 2021 del 2,5% y sin incluir aquí septiembre, puesto que está aún la duda de si el nuevo SMI entra en vigor en este mes o en octubre. Si finalmente se aplicara desde octubre, la pérdida aumentaría hasta los 237 euros.
Y lo más probable es que ni siquiera en los últimos meses del año mantengan el poder adquisitivo, puesto que la horquilla que maneja el Ejecutivo de subida está por debajo de los 23,75 euros de pérdida que tienen al mes por efecto de la alta inflación. A no ser que los sindicatos se impongan y el incremento se eleve hasta los 25 euros mensuales.
El mayor incremento de toda la historia en el SMI se registró en el año 2019, cuando de golpe y porrazo se elevó un 22,3% hasta los 900 euros. En 2020 volvió a aumentar otro 5% hasta los 950 euros actuales. El Banco de España señala en un reciente informe en el que analiza sus efectos que entre 1981 y 2020 ha crecido a una tasa media anual del 5%, similar a la de las pensiones mínimas (5,1%) y más dinámica que la de los salarios pactados en convenio (4,2%). El supervisor precisa que la fuerte alza registrada en los últimos años ha permitido aumentar el poder adquisitivo hasta alcanzar una revalorización acumulada con respecto a 1983 del 38%, similar a la experimentada por las pensiones mínimas (40%) y claramente superior a la de los salarios pactados en convenio (4%), aunque, lógicamente, no incluye aquí la pérdida que habrá este año.
Mujeres de mediana edad que trabajan en Andalucía en el sector servicios serán las principales beneficiarias de la nueva subida del SMI, según un estudio realizado por CCOO. Prácticamente seis de cada diez beneficiarias son mujeres, puesto que ellas son las que tienen por lo general empleos más precarios, según el estudio del sindicato, que se basa en datos extraídos de la EPA anual de 2018 sin contabilizar para el perfil los trabajos a tiempo parcial, que aumentarían aún más este porcentaje.
