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Renovarse para seguir siendo competitivos. Este es el mayor reto de las empresas que forman parte del polo petroquímico de las comarcas de Tarragona y las compañías de servicios que orbitan a su alrededor, un auténtico músculo económico de la provincia que, en última instancia, depende del trabajo de personas que deben estar formadas y preparadas para ofrecer la máxima garantía de calidad y de efectividad.
Todos los equipos de primera división miden su proyección de futuro a partir de los activos que se encuentran en sus canteras, los jugadores del futuro que determinarán, en gran medida, los éxitos de la formación. Esta analogía se repite en las empresas dedicadas a la industria e innovación química de Tarragona, que se nutren también de futuros profesionales que se forman en centros de proximidad.
«Los institutos de Formación Profesional del Territorio y también la Universitat Rovira i Virgili son principalmente el origen de la mayoría de los profesionales que se incorporan a la industria química», afirma el presidente de la Comissió Sociolaboral de la Associació Empresarial Química de Tarragona (AEQT) y CEO de Elix Polymers, David Castañeda, que apunta que, dependiendo del perfil y del puesto vacante a cubrir, el origen de los futuros profesionales proviene de uno u otro origen pero que «la realidad es que la inmensa mayoría son profesionales que se han formado en las instituciones docentes de nuestro territorio».
Esta realidad conduce a la necesaria reflexión. ¿Ofrece el territorio las mejores opciones formativas para estos futuros profesionales? En este sentido la opinión de Castañeda es categórica al afirmar que, a nivel cualitativo, las comarcas de Tarragona «pueden estar orgullosas de las instituciones educativas con las que contamos, desde los institutos de Formación Profesional como el Pere Martell, el Comte de Rius, el Vidal i Barraquer, l’Escola Joan XXIII, hasta la propia Universitat Rovira i Virgili, una universidad de primer nivel que nos nutre de los perfiles más técnicos».
A nivel cuantitativo, el responsable de la Comissió Sociolaboral de la AEQT destaca que «existe cierto margen de crecimiento en algunas titulaciones, en particular el Ciclo Formativo de Grado Superior en Química Industrial, que es naturalmente el más demandado». En este punto, Castañeda incide al apuntar que «a menudo hay más demanda por parte del sector de la que se puede satisfacer con los alumnos que se gradúan cada año». Por este motivo, el sector químico destaca la importancia de dotar a estos estudios del crecimiento necesario para que esas oportunidades de puestos de trabajo se puedan aprovechar.
En conjunto, los expertos consideran que, actualmente, el perfil laboral que más solicitan las empresas del polo petroquímico de Tarragona es el de Operador de Planta Química, una demanda que se agudiza en épocas de relevo generacional, momentos en los que se abre una brecha para incorporar a más alumnos de los que se gradúan cada año, según explica Castañeda. Más allá de ese perfil concreto, el sector incide en potenciar la demanda de perfiles combinados, es decir, de profesionales que reúnan, al mismo tiempo, competencia en más de un área específica. «Por ejemplo, se buscan alumnos formados en Química Industrial, pero que también tengan conocimientos de Mantenimiento y de Prevención de Riesgos Laborales, o también en Instrumentación y Control, es decir, perfiles con versatilidad, formados y especializados en más de un área».
En cuanto a la formación para adquirir estos conocimientos, las necesidades se nutren de graduados en Formación Profesional o titulados universitarios. «Entre las competencias complementarias que más se necesitan hoy, destacan la Prevención de Riesgos Laborales, la formación en Medio Ambiente o el dominio de la herramienta informática SAP», explica el responsable de la Comissió Sociolaboral de la AEQT.
Renovación
En este marco, el reto de renovar las plantillas actualmente existentes debe ser compartido tanto por empresas, como por centros de formación y entidades gubernamentales. Este es un acuerdo tácito que comparten tanto representantes del sector empresarial como los portavoces de los grandes sindicatos.
«Es importante que se renueven los puestos de trabajo de los profesionales que se están jubilado con nuevas incorporaciones que cuenten con el máximo de experiencia dentro del mundo empresarial», afirma el secretario general de FIA-UGT Tarragona de FIA-UGT Tarragona, Àngel Clua.
Clua confirma que la demanda empresarial se centra, sobre todo, en perfiles de la rama de los estudios superiores de Química Industrial, Laboratorio de Análisis y Control y Higiene y Mantenimiento Industrial, entre otros, perfiles que, añade, se deben incorporar al mundo laboral «con un ensamblaje correcto de la Formación Profesional y la Formación Profesional Dual, que son totalmente estratégicas para el territorio».
En una posición similar se expresa el secretario general de CCOO de Industria en Tarragona, José M. Martín Álvarez, que confirma la demanda empresarial de estos perfiles, en especial de los Operadores de Planta Química, un perfil que, según afirma, puede recibir sueldos anuales de entre 20.000 y 24.000 euros, según el convenio general de la industria química.
«Lo cierto es que estos baremos son cambiantes según el tipo de empresa, ya que en empresas grandes del polo petroquímico tarraconense, la cantidad se puede llegar a doblar», apunta Martín, que sostiene que la industria petroquímica del territorio cuenta con un gran porcentaje de contratos indefinidos. «Tenemos que apostar por los profesionales universitarios, pero sobre todo por los oficios que dependen de la Formación Profesional», recuerda.
Según datos de las empresas del polo petroquímico, el porcentaje de contratos indefinidos en el sector se acerca al 93%. Así lo confirma el presidente de la Comissió Sociolaboral de la Associació Empresarial Química de Tarragona (AEQT), David Castañeda, que afirma que este activo -sumado a condiciones como los incentivos de flexibilidad, la conciliación laboral o la aplicación de políticas de igualdad- supone «un indudable polo de atracción de talento».
El reto de futuro es el de saber gestionar y maximizar todas estas oportunidades. En este plano, Castañeda sostiene que desde el núcleo empresarial se trabaja en comunión con los centros formativos para presentar el sector como una salida profesional atractiva, ya sea a través de promociones abiertas a la sociedad, como La Setmana de la Ciència, como a través de planes específicos que persiguen encontrar los mejores profesionales de mañana.
