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La panadería Panishop de la calle Sant Joan de Reus es un hervidero de gente a lo largo de todo el día. Julio Jiménez Gómez trabajaba en banca y la crisis de 2008 hizo virar el rumbo de su vida. Conoció el establecimiento en Tarragona y le gustó tanto que decidió apostar por él en la capital del Baix Camp. Un negocio que, como muchos, cuenta con el apoyo del banco BBVA incluso en situaciones tan críticas como las actuales.
¿Cómo surgió la idea de abrir una franquicia de Panishop en Reus?
Trabajaba en otro sector, pero con la crisis de 2008 me quedé sin trabajo. Un día, pensando en cómo reorientarme profesionalmente, descubrí el local de Panishop en Tarragona y me encantó el producto, así que con la indemnización y algo de ayuda familiar, decidí embarcarme en el negocio y abrir un nuevo establecimiento. Decidí que Reus, como ciudad grande, sería una buena apuesta. ¡Y aquí seguimos, funcionando muy bien! Este Sant Jordi celebraremos nuestro sexto aniversario.
¿Qué es lo que más le gusta de Panishop?
Sobre todo, la calidad de sus productos, con una masa madre auténtica alabada y premiada de forma internacional. Además, ofrecemos pastelería saludable y café de calidad.
¿En qué se diferencia Panishop de la competencia?
Como comentaba antes, creo que lo que más destaca es la calidad. Desde Panishop se garantiza la preparación del pan por métodos artesanales y naturales usando una masa madre de cultivo real y de calidad, libre 100% de aditivos y conservantes. Es una de las mejores del mundo, de hecho todo aquel que prueba, repite. Y creo que también nos diferenciamos por un trato excelente al cliente. Hasta la actualidad cuento con nueve trabajadores que incluso han entablado amistad con algunos clientes.
¿Cómo es el cliente de Panishop Reus?
¡Muy fiel! El perfil es de trabajadores de oficina por las mañanas y por las tardes, gente mayor que viene a disfrutar con calma de la merienda.
En estos momentos complicados, ¿qué papel juega BBVA en su negocio?
Por un descenso de las ventas y, sobre todo, por un tema de seguridad laboral y social, he decidido bajar la persiana hasta que termine el confinamiento a causa del Covid-19. BBVA me está ayudando con las cuentas del día a día y cuento con un asesor de confianza. Además, me están aconsejando sobre las dudas que van surgiendo y también en cómo poder afrontar los pagos fijos.
