El sector turístico prepara la temporada

El Diari de Tarragona acogió esta semana una nueva edición del ciclo de encuentros ‘Los desayunos de Economía & Empresas’, donde expertos y profesionales comparten reflexiones sobre algunos de los grandes temas que marcan hoy la agenda empresarial. En esta ocasión, las perspectivas del sector turístico ante la nueva temporada que arranca con esta Semana Santa.

Bajo el título El sector turístico prepara la temporada, cinco representantes de esta industria en la demarcación de Tarragona (Berta Cabré, presidenta de la Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme de la província de Tarragona; José Luís Túnez, presidente de la Associació d’agències de viatges receptives de la Costa Daurada; Joan Calvet, presidente de la Associació d’apartaments turístics de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre; Albert Savé, presidente de la Associació hotelera Costa Daurada i Terres de l’Ebre; y Joan Antón, vicepresidente de la Associació de Càmpings de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre) analizaron las perspectivas de la inminente Semana Santa y la próxima temporada de verano, pero también los retos estratégicos que afronta a medio y largo plazo. ¿Cuáles son sus preocupaciones? ¿Dónde están las oportunidades?

Berta Cabré, de la Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme de la província de Tarragona, señala, como punto de partida, «una Semana Santa temprana, lo que conlleva muchas dificultades asociadas», aunque destaca «el posicionamiento del turismo deportivo, en el que estamos trabajando desde hace tiempo con el objetivo de desestacionalizar, porque estamos muy vinculados a las vacaciones escolares».

«El reto -prosigue Berta Cabré- es trabajar otros segmentos de mercado diferentes, con el objetivo de ir captando eventos, con instalaciones adecuadas en el territorio, en segmentos como el shopping, el turismo gastronómico y enogastronómico, o el ocio, para posicionarnos como un destino fuerte todo el año».

Albert Savé, de la Associació hotelera Costa Daurada i Terres de l’Ebre, contempla unas previsiones para Semana Santa en el sector hotelero con «buenas ocupaciones», aunque coincide en ese elemento de incertidumbre: «Con una Semana Santa avanzada en el calendario, preocupa abril y mayo, que se pueden hacer largos y nos pueden hacer sufrir en ocupación».

Entre los objetivos está seguir «alargando la temporada», con perspectivas de crecimiento de tráfico en el aeropuerto de Reus que estima entre un 10% y un 15% interanual, que le llevan a pensar que «empezará una recuperación importante del mercado británico», donde «recuperar el nivel de 2019 será un reto importante».

Joan Antón, de la Associació de Càmpings de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre, coincide en que «la previsión es buena», y lo extiende a «toda la temporada», aunque en el caso concreto de los cámpings, y centrado en la Semana Santa, la ocupación de parcelas es algo que «se dirimirá todos los días, y habrá personas que decidirán el mismo día», condicionadas por la meteorología.

También en su caso comparte la opinión de que «abril y mayo serán meses muy largos», aunque con un elemento nuevo para esta temporada: «Con la entrada de Croacia en el euro han subido los precios [en ese destino turístico] de forma notable, y eso hace que el cliente alemán esté regresando aquí». A esto, Joan Antón destaca un contexto donde el cambio climático también tiene su impacto, que lleva a alargar (y en un futuro no tan lejano a desplazar) la temporada alta hacia «un otoño con mejores ocupaciones».

José Luís Túnez, de la Associació d’agències de viatges receptives de la Costa Daurada, constata que, de cara a Semana Santa «nos vemos favorecidos en turismo deportivo, que vamos consolidando, pero todavía nos queda por recuperar niveles de antes de la pandemia». En segundo lugar alerta de que «el vacío de abril y mayo es preocupante, y aquí vamos a depender más de la touroperación». De cara al conjunto de la temporada, constata, como gran novedad, «un crecimiento del mercado alemán de casi el doble».

Joan Calvet, de la Associació d’apartaments turístics de la Costa Daurada i Terres de l’Ebre, confía en «llegar a una media de ocupación del 85% esta Semana Santa, con buenas perspectivas», a la vez que coincide en el análisis que vaticina «un abril y mayo más duros», sin descartar acontecimientos como lo que sucedió en «julio del año pasado [cuando el buen clima en Europa Central hizo que muchos turistas decidiesen permanecer en sus países de origen para sus vacaciones], que fue un mes muy extraño, con lo que dependes de la climatología en los países emisores».

Los retos del sector

Pero, más allá de la temporada, este sector encara retos estratégicos a medio y largo plazo que son clave para el futuro de una industria central en la demarcación de Tarragona. Lo explica Berta Cabré, de la Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme de la província de Tarragona: «Hemos de conseguir que cuando se habla del sector turístico y de los profesionales que trabajan en él, le demos la importancia que merece».

«Con un 26% del PIB de la provincia de Tarragona, la industria turística está reconocida e identificada como algo importante por la población, que en las encuestas manifiesta que quiere turismo, y no hemos de dejar que los gobiernos nos veten en una actividad que es clave».

Entre esos vetos está, claramente, el proyecto de Hard Rock. «Si queremos que la gente pueda trabajar -prosigue Berta Cabré-, hemos de poder desarrollar actividades turísticas con tranquilidad, con el apoyo del Govern y de la sociedad, algo que es clave cuando hablamos de desarrollar nuevos proyectos».

«¿Por qué Hard Rock -añade- ha de estar continuamente en el debate cuando es un proyecto innovador y desestacionalizador? Necesitamos diversificar, y eso nos abre a un turista de shopping y de eventos de gran formato, que atrae a un cliente que se queda».

Desde el sector hotelero, Albert Savé habla de la necesidad de «hacer ver que éste es un sector atractivo para trabajar en él, para hacer carrera, con una apuesta muy fuerte en formación».

En este punto, Joan Antón, desde los cámpings, lamenta que «hay mucho talento local que se va, pero si conseguimos hacer nuestra zona atractiva, que lo es, y puedes encontrar cosas aquí como las puedes encontrar en Barcelona, podremos hacer que los perfiles altos se queden».

Joan Antón apunta otro reto: «El cambio climático lo trastocará todo de una forma que todavía no sabemos, y si hasta ahora aquí estábamos en una condición climática fantástica, de primavera eterna, ahora eso se está desplazando hacia el norte. ¿Qué pasará si París tiene nuestra climatología?».

Prepararse ante estos posibles escenarios, con una mirada estratégica a medio y largo plazo que contemple esa diversificación y búsqueda de alternativas, es prioritario. «Aquí, la sociedad está a favor del turismo», asegura Berta Cabré, que añade que «es importante que las cosas que pasan en nuestra casa las podamos decidir en nuestra casa, dándole una importancia capital a lo que diga el territorio».

José Luís Túnez, del sector de agencias de viajes receptivas, coincide: «Barcelona juega con nosotros, y lo aceptamos; cuando deberíamos tratar de imponer nuestras decisiones».

«Quizás haya turismofobia en Barcelona -concluye Berta Cabré-, pero lo que pasa en Barcelona no pasa en todo el territorio. La Catalunya Sud existe, también en infraestructuras, y hemos de ser capaces de tener nuestra voz. A futuro, somos la envidia de muchos. Lo tenemos todo. ¿Cómo no somos capaces de triunfar? Hemos de ser capaces de ordenar estas posibilidades inmensas».

Hard Rock: Sin capacidad para decidir de forma autónoma

El proyecto de Hard Rock protagonizó una parte importante del debate. Una idea se repitió: la imposibilidad de que sea la propia sociedad del Camp de Tarragona quien decida sobre este proyecto.