Vinomi: Maridaje de vino, paisaje y cultura

No hay mejor manera de conocer un lugar que hacerlo a través de la cultura, historia, gastronomía y el paisajes. En esta idea, precisamente, se basa Vinomi Rural Experience, un proyecto creado por Pilar Ferrando, quien cuenta con ya muchos años de experiencia en el sector enológico y que quería emprender un proyecto en esta misma línea.

Al igual que la comarca de la Terra Alta es un cruce de caminos entre Cataluña y Aragón, Vinomi es el tándem perfecto para conocer los paisajes de viñedos y olivos, marcados por la historia, junto a su producto estrella, el vino. Para ello, Ferrando ofrece actividades, sobre todo, catas de vino, que pueden ser tanto en las mismas bodegas como en medio de viñedos acompañados de música y que oscilan entre los 18 y los 25 euros.

Como valor añadido, la cultura está muy presente en todas las actividades, como en las visitas a los municipios que muestran sus rincones e historia, también muy vinculada a la Guerra Civil. Para conocer este episodio, la empresa tiene también una actividad que consiste en una teatralización en las trincheras de las Deeves en la Fatarella o en el campamento de la República y que incluye, en este caso, una cata de aceite, además de un desayuno campesino con productos de la tierra. Estos productos están siempre muy presentes en todas las propuestas como los maridajes con queso, chocolate, poesía y cenas, entre otros.

«Estamos muy enfocados al vino, al producto local y a la cultura también de proximidad», explica la impulsora, Pilar Ferrando, asegurando que el objetivo es buscar que «todo lo que se organiza sea de y para tierras del Ebro, tanto a nivel gastronómico como cultural».

Para Ferrando, Vinomi no es solo una empresa de organización de eventos y experiencias turística en la Terra Alta, es un homenaje al sitio que la acogió y que ama. Para la emprendedora, el proyecto es una manera de honrar esta tierra con una idea que «nació del amor a este lugar. De querer enseñar esos lugares y rincones donde llevaría a mis amigos y a toda la gente que quiero».

Paralelamente, hay otro pilar fundamental y es la colaboración con personas, bodegas y otras empresas de los alrededores, siendo consciente que «la gente de la comarca tiene cosas para decir y mostrar». Así, la Ferrando, que también estuvo muchos años guiando a los visitantes por la Cooperativa de Gandesa, se une a proyectos del sector enológico para apoyarles en eventos como ferias o showrooms y así optimizar recursos. Así mismo, los vinos de productores con los que col·labora se pueden adquirir a través de su página web, donde también se pueden reservar estas experiencias turísticas.

«Quería arrancar un proyecto con el que me sintiera identificada y que, al mismo tiempo, ayudara a la comarca a tirar adelante con el trabajo en común», explica, destacando que «las pequeñas empresas intentamos cuidar la comarca y pensar como darla a conocer desde el corazón. Así es como creo que deben hacerse las cosas, con pasión, cariño y sentimiento.

Todo el esfuerzo en el proyecto, han hecho merecedor a Vinomi del reconocimiento Mejor implementación en el Territorio, en la II edición de los premios al Emprendimiento Femenino Rosa Maria Garriga, impulsados por la l’Associació Dones pel Futur.