El primer ministro británico, Boris Johnson, se mostró ayer dispuesto a dar carpetazo a las negociaciones sobre el Brexit al advertir a la Unión Europea (UE) de que, a menos que haya un cambio «fundamental» en su posición, el Reino Unido romperá con el bloque comunitario sin acuerdo.
En un tira y afloja con el club comunitario, el jefe del Gobierno conservador elevó el tono de la amenaza al afirmar en una declaración televisada que su país puede optar por una «solución australiana» con la UE, lo que implicaría terminar las negociaciones sin pacto y pasar a regirse con sus vecinos europeos en virtud de las normas generales de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Johnson se había fijado el 15 de octubre –fecha del comienzo de la cumbre europea de Bruselas– como plazo para cerrar un acuerdo con la UE, pero varios puntos enquistados, como el acceso de la flota pesquera comunitaria a las aguas británicas, han impedido desbloquear el punto muerto en que están los contactos.
Después de que el Reino Unido saliera oficialmente de la UE el pasado 31 de enero, los negociadores británico y de la UE sobre el Brexit, David Frost y Michel Barnier, han celebrado hasta nueve rondas de negociaciones, pero la pesca y los subsidios gubernamentales a las empresas frenaron cualquier perspectiva de sellar un documento sobre la futura relación comercial.
Al endurecer su posición en el tramo final del actual periodo de transición, que terminará este 31 de diciembre, Johnson lamentó que la UE no pudiera ofrecer a su país un amplio acuerdo comercial como el que tiene con Canadá y pidió a las empresas y compañías transbordadoras que se preparen para la ruptura.
Los Veintisiete, dijo Johnson, quieren «controlar nuestra libertad legislativa de forma continua, nuestra pesca de una manera que es completamente inaceptable para un país independiente». Dado que faltan «apenas diez semanas» para que termine el acuerdo de transición, «tenemos que prepararnos» para la desconexión, dijo.
La UE reiteró ayer su intención de cerrar un acuerdo. «La UE sigue trabajando para lograr un acuerdo, pero no a cualquier precio», escribió en Twitter la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
La política alemana añadió que, «como estaba previsto», el equipo negociador comunitario viajará a Londres la próxima semana «para intensificar» las conversaciones.