Los vecinos de la plaza Pep Jai , en el centro histórico de El Vendrell, ya no aguantan más. Además, la situación no es nueva. Hace años que sufren ruidos, desórdenes e inseguridad «sin que las autoridades municipales solucionen la situación», pese a las quejas constantes.
«No podemos descansar a ninguna hora», explican. Al ruido de las tardes de gritos y pelotazos, pese a los carteles de prohibido jugar a pelota, le siguen por las noches concentraciones de jóvenes. La pasada madrugada una joven «estuvo bailando bachata con el altavoz a todo volumen. Es imposible descansar».
Ante la falta de acción por parte de las autoridades locales, los vecinos tienen previsto iniciar una serie de acciones. Este mismo lunes a las diez de la noche, bajarán a la plaza para pedir a las personas que estén concentradas que guarden el orden.
Inseguridad
Pero los vecinos además señalan que por la noche la plaza es insegura y habitual el trapicheo de droga. Además de en el espacio público, también alertan de la inseguridad en los soportales, que ya es una zona privada en la que hace unos años tuvo que incrementarse la iluminación con el objetivo de ganar en seguridad.
El Ayuntamiento también modificó el emplazamiento de una cámara de vigilancia para ganar visual de toda la zona. «Pero cuando llamamos a la Policía Local o no contestan o tenemos que llamar al 112 y tampoco acude nadie a poner orden».
Con la llegada del verano los vecinos temen que las concentraciones de grupos de personas se alarguen hasta la madrugada con ruidos y molestias.
Denuncia colectiva
En este sentido no descartan poner una denuncia colectiva contra el Ayuntamiento por no tomar medidas para garantizar el descanso de los vecinos.
Hace años el consistorio de Calafell fue denunciado por no acabar con el ruido en una calle. Pese a que en 2019 el juzgado archivó provisionalmente la denuncia, el fiscal pidió que se mantuviese abierta al no haberse solucionado la situación.
La denuncia la puso una vecina que residía en la calle y que aseguró que a debido a los ruidos sufría ansiedad, depresión e insomnio. Las mediciones que se realizaron superaron los límites de ruido. La Fiscalía de Medio Ambiente puso la denuncia y el juzgado la estimó para proteger los derechos fundamentales y por la inactividad del consistorio para aplicar medidas.
Los vecinos de la plaza Pep Jai de El Vendrell señalan que sufren insomnio y ansiedad, «que se intensifica porque el Ayuntamiento no hace nada». También señalan que podrían pedir informes médicos con los acreditar la situación en una posible denuncia. De momento bajarán a la calle a suplicar orden, pero no descartan otro tipo de acciones.
Añaden que la situación supone una degradación del centro histórico.
