La Policía Local de Torredembarra detuvo en la tarde-noche de ayer sábado a tres personas acusadas de un delito de desórdenes públicos, resistencia y desobediencia a la autoridad. Los tres sospechosos podrían ser a su vez responsables de robos o hurtos tras la confiscación de un teléfono y una bolsa de ropa deportiva de una tienda local. Dos son vecinos de Barcelona de 33 y 18 años respectivamente y un tercero (23 años) tiene residencia en Tarragona. Los acusados fueron derivados a Mossos por la noche tras terminar las diligencias en la comisaría local.
La actuación policial empezó con un vecino de Torredembarra que llamó al 112 pasadas las 19 horas de este sábado alertando a Mossos de que tres hombres estarían intentando robar en los coches aparcados y que se dirigían hacia la zona de la playa.
Mossos activó la alerta y avisó a la Policía Local, que envió a varios agentes para intentar localizar a los tres sujetos. Uno de ellos ya había visto a los tres sospechosos poco antes (conocían sus rasgos y su vestimenta gracias a la descripción del vecino). La búsqueda terminó en la estación de tren, donde unas 60 personas estaban en el andén esperando un ferrocarril en sentido Barcelona.
Los agentes se acercaron a los tres hombres y les pidieron la documentación. Seguidamente se les registró sus pertenencias y en ellas apareció un teléfono que no sabían desbloquear y una bolsa de ropa de una tienda local sin estrenar, pero sin el tiquet de compra.
La Policía informó que se quedaba en custodia los productos hasta que alguien pudiera acreditar su propiedad (por ello el delito de robo no está todavía incluido en la minuta). Y cuando ello ocurrió, la aparente tranquilidad entre los tres hombres y los agentes se rompió.
Autolesionarse
Uno de ellos bajó a las vías y cogió un cristal ante la estupefacción de los viajeros, que veían la llegada del tren al apeadero. Éste tuvo que frenar antes de tiempo y más fuerte ante la presencia imprevista de personas en las vías. Renfe ha informado que la incidencia no afectó a la circulación, si bien hubo tensión ante lo ocurrido.
La situación de los hombres con los agentes cambió. Además del que cogió un cristal y empezó a autolesionarse. Otro sacó una navaja y se hizo un corte en el cuello. el tercero amenazo con cortarse el cuello ante las cámaras improvisadas de los viajeros que contemplaban el ‘espectáculo’.
La situación obligó a pedir refuerzos (ayudaron agentes de la Policía Local de Altafulla) y al final se pudo neutralizar a dos en el mismo andén y un tercero en la calle Barcelona. Ninguna de las heridas autoinfligidas fueron de gravedad.
