El puerto de Cambrils recibió ayer de buena mañana una visita muy especial. El pailebote Santa Eulàlia, posiblemente el más antiguo que todavía navega por el Mediterráneo, llegó al municipio costero para abrir sus puertas con motivo de su centenario, una actividad que también se podrá realizar este sábado hasta las 14 horas.
El velero hizo acto de presencia en Cambrils a petición de la Associació Arjau Vela Llatina, que este año celebra su veinte aniversario. Su presidente, Jordi Piqué Costa, aseguró que tener a este pailebote en el puerto era como un regalo de Reyes.
«Es la máxima aspiración tener a un barco centenario, muy limitado y de estas características. En Catalunya prácticamente no hay ningún otro y tenerlo aquí es emocionante», apuntó.
El Santa Eulàlia, de 47 metros de eslora, está celebrando este 2018 sus cien años con un itinerario especial que pasa por todo el litoral catalán. Hace tres años ya estuvo en el municipio y ahora ha vuelto para dar la oportunidad a los cambrilenses de poder visitarlo.
«Nos hubiera gustado que estuviera más cerca del puerto pero por sus características no ha podido ser», explicó Piqué.
Bien Cultural de Interés Nacional
Los visitantes que se acercaron durante todo el día festivo para ver en directo el velero de madera estaban fascinados por su buen estado. El pailebote se construyó en 1918 en una playa de Torrevieja (Alicante) para comerciantes entre España y América y su nombre era ‘Carmen Flores’, en honor a la hija de quien lo encargó.
Años más tarde fue rebautizado con el nombre ‘Puerto de Palma’ y posteriormente ‘Cala San Vicenç’, y además se le añadió un motor. En 1975 pasó a llamarse ‘Sayremar Uno’ y se utilizaba como barco auxiliar para trabajos submarinos, hasta que fue adquirido en 1997 por el Museu Marítim de Barcelona en una subasta con la intención de devolverle su aspecto original, con sus tres palos.
El pailebote, que navega y realiza diferentes actividades como llevar a los Reyes Magos al puerto de Barcelona, fue declarado en 2010 Bien Cultural de Interés Nacional por la Generalitat de Catalunya.
Poner en valor el patrimonio
L’Associació Arjau Vela Llatina celebra estos primeros veinte años de existencia con buena parte de los objetivos conseguidos. «Nuestra misión es recuperar algunas tradiciones como la pesca de l’Ormeig, que recrea el oficio del pescador, las regatas de laúd o la navegación tradicional», apuntó el presidente.
En estos años, la entidad ha trabajado para salvaguardar y poner en valor los elementos patrimoniales marítimos cambrilenses para mantenerlos vivos. Por este motivo, se involucra activamente en la Festa Major de Sant Pere para que los ciudadanos y turistas conozcan estas actividades tradicionales, como por ejemplo, con la Festa de l’Ormeig, que se celebrará hoy por la tarde en la playa del Regueral.
Para llevar a cabo estas tareas, la asociación tiene cerca de 80 socios y cuenta con la colaboración de diferentes entidades que les ofrecen su ayuda para conseguir que las recreaciones sean un éxito.
De cara al futuro, Piqué señala que lo más importante es mantener esta «presencia» que han conseguido consolidar con su trabajo activo año tras año para que el patrimonio siga vivo y su participación en diferentes festivales y encuentros marítimos.
