El Taller Baix Camp ha instalado placas solares en su Centre Ocupacional de la calle Víctor Català. El montaje, que se colocó a finales de febrero, facilitará el autoconsumo. Cuenta con una potencia pico de 50,96 kW que «en un día soleado, permite al edificio ser autosuficiente ofreciendo la energía necesaria para su funcionamiento e incluso posibilita generar un excedente que se inyectará en la red eléctrica».
El conjunto, integrado por un total de 112 módulos fotovoltaicos, ha supuesto una inversión de cerca de 60.000 euros que «seguramente habremos amortizado en alrededor de 10 años», tal como detalla Josep Ramon Nogués, director general del Taller Baix Camp. El de Víctor Català es el mayor de los tres centros ocupacionales que tiene la entidad y presta servicio a más de 140 personas con discapacidad intelectual. Les ofrece los apoyos necesarios para mejorar su calidad de vida y las placas «también darán lugar a un entorno más limpio y sostenible».
Nogués especifica que «la finalidad principal de la instalación es el autoconsumo» y apunta que, con ella, «ahorraremos unas 44 toneladas de CO2 al año». La idea es «seguir la línea que llevamos desde hace algunos años de trabajar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030».
El excedente energético, a la red
«Queríamos ser energéticamente más sostenibles, limitar las emisiones y mejorar en lo posible la situación de cambio climático», añade el director del Taller Baix Camp, que precisa que «la cantidad de metros de cubiertas que tenemos, que son espacios que no se utilizan, creímos que era buena idea poder aprovecharlos con este parque de generación de energía fotovoltaica». Por otro lado, «las subidas del precio de la electricidad que ha habido en los últimos meses, de alguna manera, también nos empujaron a la reducción de costes y a apostar por energía con la que no tengamos que depender siempre de los externos».
De los 60.000 euros de inversión, «hay una parte que está financiada por las ayudas que hay actualmente mientras que el resto se ha asumido con recursos propios». «Igualmente, formamos parte, mirando al futuro, de la comunidad energética que ya está tomando forma en el polígono AgroReus bajo el liderato de la concejalía de Medi Ambient», prosigue, e indica que «eso también implicará más energía verde y a la vez será una ayuda en muchos aspectos».
Además, y «teniendo en cuenta que hay horas en que el centro no está en funcionamiento, habrá excedentes que irán a la red y que al final serán para el uso general». La previsión es que el uso de placas «lo extendamos al resto de centros», teniendo en cuenta que «las siguientes instalaciones se realizarán bajo el paraguas de la comunidad energética de AgroReus en la que participaremos junto a otras empresas del mismo polígono».