Las elecciones de 2023 no serán las primeras para muchos de los aspirantes a la alcaldía de Reus. Al menos la mitad de los actuales portavoces municipales repetirán en las carteleras. A la ya confirmada Noemí Llauradó (ERC), hay que sumarle la intención de Dani Rubio (Ara Reus) de revalidar la candidatura e igualmente Andreu Martín (PSC) apunta a cabeza de lista. En Cs, «no se prevén grandes cambios de nombres» y hay «confianza» en el equipo de Débora García. Todos ellos van a concurrir a los comicios, también, con el bagaje de lo que hayan hecho o dejado de hacer en los últimos cuatro años.
Teresa Pallarès (Junts) será, salvo sorpresa, una de las novedades, después de que el alcalde Carles Pellicer comunicase que no intentará el cuarto mandato consecutivo. La formación ha puesto en marcha la maquinaria para la celebración de primarias y estrenará candidato proclamado en cosa de pocas semanas. Y en la CUP se esperan movimientos, teniendo en cuenta que el límite temporal que aplica a los cargos públicos no permitiría a Marta Llorens continuar.
Llauradó ya avisó en su puesta de largo de que, para ella, «es el momento de liderar el gobierno de Reus» y aseguró sentirse «preparada para ir un paso más allá». Ara Reus oficializará la candidatura de Rubio en otoño y el PSC haría lo propio con Martín probablemente antes de la llegada del verano, igualmente tras las primarias. Cs piensa en la continuidad de García.
Pero en el salón de plenos aún hay más nombres. Raúl Meléndez, que hacia noviembre de 2020 dejó el grupo de Cs, tal como declaró entonces, al considerar que «no sigue los valores de quienes le votaron» y pasó a ser no adscrito, ha tomado, en principio, la determinación de no seguir en política. Apostará por involucrarse en nuevos proyectos personales y empresariales. Pese a haber recibido la propuesta de algún partido, ha preferido, por lo menos hasta hoy, declinarlas y pondrá fin a su incursión en el Ayuntamiento.
En el PP, que perdió la representación en 2019, el objetivo es volver a entrar. La designación del candidato para Reus se encuentra pendiente de que el proceso se lleve a cabo primero en las capitales de provincia, sin que exista fecha marcada, aunque podría haber culminado alrededor del verano. Sebastià Domènech, que fue el último alcaldable popular –se quedó a las puertas con 2.052 votos, un 4,7%, y a unos 700 de Ara Reus, después de 16 años de concejal– está a disposición del partido. Al PP le siguió En Comú Podem, que en breve hará primarias.
Otro ex de Cs es Juan Carlos Sánchez. A casi un mes de celebrarse las anteriores municipales, y tras haber apuntado internamente lo que consideró supuestas irregularidades vinculadas a un cargo del partido, Sánchez acabó abruptamente fuera de la formación naranja. Optó por armar entonces, junto a algunos de los que habían sido sus compañeros de grupo, una alternativa con dDICE que le permitiese estar en las urnas. Igual que Meléndez, también él atrajo el interés de otros colores pero, si no hay cambios de última hora, no se volverá a presentar.
El proyecto vecinal
Quien sí lo hará es Valentín Rodríguez. En 2019, el que hasta poco antes había sido presidente de la Federació d’Associacions de Veïns de Reus (FAVR) finalizó aquella etapa y confeccionó una lista que aglutinó a varios líderes vecinales. La intención era que los barrios, los vecinos, tuviesen directamente voz en el Ayuntamiento, de alguna manera, sin intermediarios. El partido logró hacerse con 794 votos el 26-M y se colocó como décima fuerza por delante de Primàries y dCIDE. Ahora, a expensas de que se oficialice la candidatura –un paso que se dará hacia octubre–, Rodríguez será nuevamente el alcaldable de Entre Veïns.
