El Tiempo
Estado Carreteras
Whatsapp
Encuesta
Directorio Empresas
Juegos
Un estilo de vida más sedentario y al uso intensivo de los móviles contribuyen a que los jóvenes sean cada vez más miopes y a edades más tempranas. Los niños de entre 7 y 12 años tienen actualmente media dioptría más de miopía que los universitarios de hace una generación, según alertan los médicos especialistas. La miopía crece en todo el mundo, especialmente entre los jóvenes universitarios como demuestra el estudio de Prevalencia de la miopía en los jóvenes en España, 2018. Entre los jóvenes no universitarios el porcentaje no es tan alto pero también es mayor que en generaciones anteriores. «La mayoría de este aumento es debido a la miopía escolar o miopía simple. Hay una variación geográfica notable, es mucho mayor en Asia, menor en África y con una afectación intermedia en Europa. En España cerca del 50% de los jóvenes tiene miopía y este porcentaje llega al 60% en los jóvenes universitarios», explica el doctor Marcos Gómez García, especialista oftalmólogo en la Clínica Baviera de Tarragona.
Él mismo recuerda que la miopía se clasifica en fisiológica (también se llama miopía simple) y patológica. Comenta que «la primera es la más común y el ojo es normal y constituye el 95% de los casos de miopía; mientras que la miopía patológica es cuando se superan 6 dioptrías y se acompaña de otros problemas en el ojo que requieren cuidados y revisiones periódicas por parte del médico especialista». En países como Estados Unidos la diferencia de porcentaje de miopes entre los diferentes orígenes raciales indica que el origen genético es importante. «La herencia juega un papel más definido en la miopía patológica pero cómo ya hemos indicado es muy minoritaria y sólo afecta al 5% de todos los miopes», afirma el doctor.
Origen multifactorial
Aunque el especialista resalta que «no hay una causa sino muchas» por las que los jóvenes son cada vez más miopes, destaca que «el aumento de horas en tareas cercanas y la genética son dos de los más conocidos». «En el mundo desarrollado, debido a las nuevas tecnologías como el móvil y el ordenador, pasamos cada vez más tiempo mirando en distancias cortas. Estas actividades prolongadas en la visión cercana reducen el tiempo que los niños y adolescentes pasan al aire libre utilizando la visión en distancias largas», comenta el doctor.
El doctor Marcos Gómez García, especialista oftalmólogo en la Clínica Baviera de Tarragona, asegura que «cuanto antes detectemos la miopía mejor podrá adaptarse nuestro hijo, seguir el curso de las clases y el aprendizaje». En cada etapa de la vida son necesarias pruebas diferenciadas que el equipo de especialistas determinaráPor esta razón, los especialistas recomiendan que los jóvenes dediquen más tiempo a actividades al aire libre. ¿Cuánto tiempo? «Al menos dos horas diarias, pero no sirve estar en el patio del cole mirando el móvil. Por otro lado, esto tendrá también beneficios en el desarrollo psicoemocional de nuestros hijos que podrán socializarse más para trabajar mejor en equipo cuando sean adultos», asegura el especialista oftalmólogo de la Clínica Baviera de Tarragona.
Mientras, enfermedades oculares como el ojo seco también dañan la salud visual de los jóvenes. «Es otra de las enfermedades oculares que se extiende entre la población y que aparece cada vez en edades más tempranas en los países desarrollados. Se ve favorecida por los mismos motivos, ambientes cerrados, el uso de ordenadores y de teléfonos móviles», asegura el especialista.
Enfermedades oculares como el ojo seco también dañan la salud visual de los jóvenesEl estilo de vida
Mientras, advierte de que «la salud ocular no es un problema aislado». «Muchos de los problemas de salud vienen de los cambios en el estilo de vida, volver a un patio del colegio donde los niños juegan mejorará la capacidad de trabajo en equipo, socialización, salud mental y cuerpo sano», asegura el doctor Marcos Gómez García.
Los cambios nutricionales -como la comida basura- impactan en todo el organismo, también en los ojos a través de déficits nutricionales o problemas circulatorios. «Somos lo que comemos sugirió Hipócrates en el siglo V antes de Cristo. Es cierto que el ritmo de vida actual juega en nuestra contra pero no siempre. Tener el frutero de casa lleno y dar ejemplo a nuestros hijos tomando cada día dos o tres piezas de fruta es sencillo y permite crear hábitos que mejorarán su nutrición. En verano, es un buen momento para introducir abundantes vegetales en la dieta, a través de ensaladas cuesta menos la preparación de los alimentos y conseguiremos mejorar la hidratación, que es un factor clave en la sequedad ocular», afirma el especialista oftalmólogo.
Llegados a este punto, el doctor Marcos Gómez García explica que «podemos dar ejemplo mejorando nuestros hábitos nutricionales y reduciendo el uso del móvil y ordenador delante de nuestros hijos». También recomienda «hablar con los profesores y personal que les cuida nos permitirá acercarnos a ese equipo que dedica su atención al desarrollo y podremos comentar preocupaciones y colaborar en la detección precoz de los problemas que puedan presentarse».
