Muere una bebé de 10 meses tras ser olvidada por su abuelo en el coche

La pequeña pasó ocho horas en el vehículo a temperaturas extremadamente altas, lo que causó el fallecimiento

11 agosto 2018 08:40 | Actualizado a 11 agosto 2018 08:47
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Una bebé de diez meses ha fallecido hoy en la localidad mallorquina de Manacor después de que el abuelo, de 56 años y que estaba a cargo de la nieta, se la dejara olvidada en el interior del coche durante varias horas, lo que la sometió a altas temperaturas, ha informado la Policía Nacional.

El suceso ha tenido lugar en la calle S'Hort des Cabré de Manacor cuando el hombre ha dejado a la pequeña en su automóvil, al parecer sobre las siete de la mañana, cuando la pequeña estaba dormida.
Según fuentes policiales, a las 15.00 horas el abuelo se ha acordado de que su nieta estaba en el automóvil.

El hombre regresó al coche y pidió ayuda de manera inmediata y, de hecho, la bebé fue atendida en primera instancia por un médico que pasaba por la calle y por dos empleadas de una clínica cercana, que no han podido reanimarla.

La pequeña fue atendida en un portal de la referida calle, cerca del coche, pero los equipos sanitarios que se desplazaron al lugar para atenderla no pudieron hacer nada por salvarle la vida.

La bebé ha muerto debido a la elevada temperatura del interior del coche, mientras que su abuelo ha sido conducido al Hospital de Manacor por el cuadro de nerviosismo en el que se encontraba.

El abuelo y la pequeña son de nacionalidad española y el cadáver de la bebé ha sido trasladado al Instituto Anatómico Forense de Palma, donde se le practicará la autopsia. 

Homicidio imprudente

La Policía Nacional ha imputado al hombre un delito de "muerte imprudente". Fuentes policiales han informado que el hombre será interrogado esta noche en dependencias de la Policía Nacional de Manacor, después de que haya sido dado de alta del Hospital de Manacor tras ser ingresado por el estado de nerviosismo en el que se encontraba tras encontrar a su nieta.

La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer los hechos y, según una primera versión ofrecida por el abuelo justo después de fallecer la pequeña, el hombre aparcó el coche en la calle S'Hort de Manacor sobre las siete de la mañana y, se fue a tomar un café mientras la bebé dormía en el automóvil. 
 

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