Pide perdón de rodillas al tribunal la madre que tiró a su bebé a la basura

La mujer, colombiana de 37 años y que ocultó su embarazo a la familia, se enfrenta a una petición de pena de 14 años de prisión

19 mayo 2017 16:09 | Actualizado a 21 mayo 2017 14:08
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La mujer que supuestamente arrojó a un contenedor de basura a su bebé recién nacido en Mejorada del Campo reconoció que pudo matar a su hijo y de rodillas ante el tribunal pidió perdón por la «barbaridad» que cometió: «Estoy muy arrepentida, espero que un día mis hijos me puedan perdonar».

Catalina D.M, que está en prisión desde mediados de julio de 2015, se enfrenta a 14 años de cárcel por un delito de asesinato en grado de tentativa acusada de haber arrojado a la basura a su bebé en Mejorada del Campo tras ocultar su embarazo a la familia, en el juicio que se celebró en la Audiencia Provincial de Madrid.

La Fiscalía pedía 27 años, pero al aplicarle el último Código Penal que es más beneficioso para el acusado y la reciente jurisprudencia del Supremo, la pena máxima que puede solicitar es de 15 años, que dejó en 14 al reconocer los hechos, como hizo nada más comenzar la vista, aunque particularmente al final. Fue en el turno de última palabra cuando, ante una sala abarrotada, la mujer –que tiene tres hijos más– se levantó de la silla y llorando se quitó la capucha de su chaqueta para arrodillarse ante el tribunal y pedir perdón.

«Pido perdón, estoy muy arrepentida por lo que he hecho, lo más importante son mis hijos, que un día me puedan conceder el perdón. Fue una barbaridad, pero no quiero perder a mi niño», dijo con la voz quebrada.


Un hombre oyó al pequeño
La mujer reconoció que el 15 de julio de 2015 cogió al bebé y lo metió en una bolsa de deporte para después introducirlo en otra de basura y anudarla. A continuación arrojó todo en un contenedorde restos orgánicos, de tipo subterráneo, donde había más de treinta bolsas.

Fue un hombre que paseaba a sus perros el que se percató de un ruido en los contenedores que en un principio pensó que era el «llanto de una cría de gato» y quiso salvarlo con la ayuda de un vecino, y fue cuando ambos se dieroncuenta de que era un bebé que lloraba.

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