Quinta muerte por coronavirus fuera de China: un taxista de Taiwán

Ya ha habido víctimas mortales en Filipinas, Hong Kong, Japón y el sábado, la primera de Europa, en Francia

17 febrero 2020 09:00 | Actualizado a 17 febrero 2020 09:17
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Taiwán confirmó ayer la primera muerte en la isla por el coronavirus, un hombre de 61 años que falleció el sábado tras haber sido diagnosticado con neumonía y que había sido hospitalizado el pasado 3 de febrero, informa la agencia oficial de noticias CNA.

Según la información, el hombre, que padecía de diabetes y hepatitis B, no había salido de Taiwán antes de enfermar ni había tenido contacto cercano con ningún caso confirmado de COVID-19.

El hombre murió el pasado sábado tras contraer la neumonía y le fue diagnosticado el virus poco antes de fallecer.

«Podría tratarse del primer caso transmitido a nivel local en Taiwán», señaló hoy en rueda de prensa el ministro de salud taiwanés, Chen Shih-chung, quien aseguró que las autoridades van a investigar a fondo para encontrar la fuente de infección.

De acuerdo con la agencia CNA, el hombre era un taxista que atendía con regularidad a clientes que viajaban desde y hacia China, Hong Kong y Macao.

Las autoridades sanitarias taiwanesas están ahora verificando sus registros médicos, datos almacenados en su teléfono y cámaras de vigilancia para determinar cómo pudo haberse infectado con el virus.

Asimismo, Chen añadió que hoy se confirmaron dos nuevos casos en la isla, con lo que el total de infectados por el virus asciende a 20 personas.

Con este fallecimiento, hasta la fecha, se han producido ya cinco muertes fuera de China continental -en Taiwán, Japón, Francia, Filipinas y Hong Kong-, donde nació el brote.

Los síntomas del nuevo coronavirus son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden estar acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar)

Evacuación del Diamond Princess

Estados Unidos empezó la evacuación de sus ciudadanos que se encuentran desde hace días frente a las costas de Japón en un crucero en cuarentena donde se han constatado 355 casos del nuevo coronavirus, 70 solo este domingo. La evacuación llega cuando las autoridades de Japón han incrementado sus advertencias sobre el brote, instando a los ciudadanos a evitar lugares concurridos. Otros países como Hong Kong, Australia o Canadá también están estudiando cómo sacar a sus nacionales del Diamond Princess. Además de los casos en el crucero, las autoridades niponas informaron de seis nuevos casos registrados el domingo, la mayoría en Tokio, lo que eleva a 59 el número de casos confirmados.

Los estadounidenses salieron del barco en grupos, pasando por un control de pasaportes improvisado, aunque no se sometieron a controles de salud, declaró a AFP Sara Arana, una pasajera californiana. Después subieron a bordo de autobuses, donde los conductores llevaban trajes protectores, y se les informó de que más de una docena de vehículos viajarían en un convoy. «Estoy feliz y lista para irme», dijo Arana antes de salir del barco. «Necesitamos una cuarentena correcta, esta no lo era», agregó.

El Gobierno de Estados Unidos debería haber intervenido «mucho antes, al principio», dijo esta trabajadora social médica de 52 años.

Dos vuelos chárter deben llevar a los pasajeros del crucero a Estados Unidos, donde una parte permanecerá en cuarentena 14 días en una base militar de California y otra en Texas.

Negativa a evacuar

Pero otros ciudadanos estadounidenses rechazaron la evacuación, a pesar de haber sido advertido de que aún tendrán que esperar dos semanas y dar negativo en los tests del virus antes de que puedan volver a casa. «Mi salud está bien. Y mis dos semanas de cuarentena casi han terminado. ¿Por qué querría subirme a un autobús y a un avión con otra gente que cree que está infectada cuando he pasado casi dos semanas aislado de esa gente?», tuiteó Matt Smith, un abogado a bordo del barco con su mujer.

Este domingo se habían registrado 355 casos en este barco, 70 más respecto al sábado, cuando se contabilizaron 67 nuevos contagios respecto al viernes. Pero las 3.711 personas que se hallan a bordo no han sido sometidas todas a los análisis que permiten establecer su eventual contaminación. «Hasta ahora hemos efectuado pruebas a un total de 1.219 personas», declaró el ministro japonés de Sanidad, Katsunobu Kato, a la cadena nipona NHK.

El fin de la cuarentena de los pasajeros del crucero está previsto para el 19 de febrero, pero los recientes acontecimientos podrían modificar este calendario. El Diamond Princess efectuaba un crucero con varias escalas en Asia cuando un pasajero que desembarcó en Hong Kong dio positivo por el nuevo coronavirus. A raíz de ese caso, cuando el crucero llegó a las costas de Japón no logró autorización para atracar y todas las personas fueron puestas en cuarentena. Los casos confirmados han sido desembarcados y transferidos a hospitales japoneses especialmente equipados.

Por su parte, el Gobierno de Malasia anunció ayer que no permitirá que atraque en sus puertos ningún crucero que proceda o haya hecho escala en China para prevenir contagios de COVID-19, después de que ayer se detectara en Kuala Lumpur el coronavirus en una mujer estadounidense que había desembarcado en Camboya.

«Sabemos que el barco había desembarcado en Hong Kong por una noche antes de partir el 1 de febrero para un viaje de 14 días por Asia Oriental. Por tanto, hay una posibilidad de contacto entre los pasajeros y la población de Hong Kong, donde algunos podrían haber estado expuestos al virus», explicó la vice primera ministra malasia Wan Azizah Wan Ismail en un conferencia de prensa.

La viceprimera ministra se refería al caso de una mujer estadounidense de 83 años que había dado positivo el sábado de COVID-19 en un control en Kuala Lumpur, tras haber viajado desde Camboya, donde había atracado el crucero Wasterdam el pasado viernes, después de haber sido rechazado por otros cinco países.

La mujer y su marido, que dio negativo en las pruebas, fueron ingresados ayer en un hospital de la capital malasia, mientras las autoridades del país cancelaban todos los vuelos desde Camboya.

Comentarios
Multimedia Diari