Un CDR preso ‘espió’ a los Mossos con un boli

Jordi Ros, uno de los siete integrantes del autodenominado Equipo de Respuesta Táctica (ERT), el ala dura de los CDR desmantelada en la ‘operación Judas’, tenía en su domicilio de Sabadell información sobre seguimiento a los Mossos.

En los registros judiciales en su casa, la misma donde en mayo pasado se produjo un incendio a causa, presuntamente, de la manipulación de precursores para la fabricación de explosivos, se intervinieron dispositivos electrónicos que contenían documentación sobre vehículos policiales.

Según el sumario, en uno de los dos teléfonos requisados había fotografías de vehículos camuflados de la Policía Nacional y de los Mossos que trabajaban en los servicios de información. El de la policía autonómica era un Renault Megane adscrito a la Presidencia de la Generalitat, según la investigación de la Guardia Civil, responsable de las pesquisas judiciales de la ‘operación Judas’. Y el de la Policía era un Seat León inscrito a la Secretaria de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior.

Asimismo, también se halló un vídeo grabado «desde un medio oculto dentro de un bolígrafo».