Unir fuerzas contra el cambio climático

El aumento de las temperaturas no da tregua. El cambio climático se ha convertido en una amenaza global que además de poner en peligro el futuro del planeta, también tiene repercusiones en la salud. No queda otra que unir fuerzas para afrontar el que será el principal reto medioambiental de los próximos años y décadas. 

Las temperaturas extremas serán una constante en adelante. Olas de calor y prolongadas sequías son el catastrófico futuro que espera a la población si no se actúa en consecuencia. Así lo puso de manifiesto el Tercer Informe del Cambio Climático presentado por la Generalitat de Catalunya a principios de año. El pronóstico no es nada esperanzador y, según el estudio, las olas de calor provocarán 2.500 muertes en 2050, muy por encima de las cifras actuales. 

Aumentarán las temperaturas extremas, las olas de calor y se prolongarán las sequías

El aumento generalizado de las temperaturas, con mínimas por encima de los 20 grados y en algunos casos llegando a superar los 25 grados, impactará en mayor medida a niños, gente mayor y personas de bajo nivel socioeconómico y con problemas de salud. 

Pendientes del tiempo y de las temperaturas. Así viven la primavera las personas con alergia y asma. Atentos a la lluvia y el calor que son dos factores que mantienen a raya los niveles de polen. Los especialistas médicos llevan años advirtiendo que la prevalencia de las alergias no mejorará, y no lo hará con la exposición al impacto del cambio climático. Se calcula que en los últimos 15 años se han doblado el número de pacientes con alergia. Y la tendencia es a aumentar en un futuro. Si buscas culpables, la contaminación es la primera señalada, seguido del estilo de vida y del cambio climático. El calentamiento provoca que la estación polínica se avance y que pueda durar más y ser más intensa, y el aumento de la contaminación y el cambio climático hacen que las alergias sean más.

Erosión de las playas

Las playas también serán las grandes damnificadas. Las previsiones no son nada optimistas en los próximos años y en lo que queda de siglo XXI. El litoral de las comarcas del Montsià, Baix Ebre, el Tarragonès y el Baix Penedès será el más afectado por el cambio climático. La erosión de las playas de las Terres de l’Ebre se multiplicará en 2060. Una realidad que no pasa desapercibida en el Tercer Informe del Cambio Climático presentado por la Generalitat de Catalunya. 

También habrá que estar pendientes de la subida del nivel del mar. Según las previsiones a lo largo de este siglo se duplicará la cifra de playas que sufrirán inundaciones en momentos de temporales en la provincia de Tarragona. Hoy en día son poco más de sesenta las playas que padecen este fenómeno, pero en 2050 la cifra se acercará a las noventa.

El litoral del Montsià, Baix Ebre, el Tarragonès y el Baix Penedès será el más afectado

El Delta de l’Ebre

Las amenazas del cambio climático también sobrevuelan el Delta de l’Ebre. Un litoral cada vez más deteriorado como consecuencia de los temporales del pasado invierno, los efectos de la salinización y el avance del mar por el cambio climático. 

Para frenar este devastador futuro los ayuntamientos del Delta de l’Ebre reclaman, desde la unidad institucional, acciones e inversiones en la zona con el objetivo de preservar la morfología actual del Delta de l’Ebre. Reclaman acciones urgentes a las administraciones competentes para mantener la línea de costa ante el avance del mar.

Y es que solo des de la unión de las fuerzas es posible combatir esta gran amenaza del siglo XXI.