Leo estos días el libro El factor Churchill, escrito por el último de sus sucesores, Boris Johnson, cuando era alcalde de Londres y aspiraba a ser primer ministro.
Aunque la existencia del león británico sea tan conocida, sorprende cómo pudo almacenar tantas vivencias antes de ser el héroe más reconocible de la II Guerra Mundial. Estremece que estuviera personalmente bajo fuego enemigo en países de cuatro continentes: India, Sudán, Sudáfrica, Cuba y el frente occidental europeo de la Primera Guerra.
Johnson destaca que cuando desafió a Hitler, Alemania dominaba Austria, Checoslovaquia, Francia, Holanda, Dinamarca, Noruega y media Polonia.
Winston Churchill nació en el palacio del duque de Marlborough, en una de sus 186 habitaciones… ¡Qué vida!