Hacer cola

Leo en un cartel de entidad bancaria: «Usted pasa 500 días de su vida haciendo cola. Vaya al cajero o a Internet». Hoy un banco no te da intereses; si te atienden, te venden cacerolas.

Volvamos a las colas, que conocemos como los rusos, sean bancarias, comerciales o de hospital. Las personas esperan ser atendidas. Se comportan con respeto unas con otras, pese a que todas compiten en alcanzar su meta.

En noviembre muchos haremos cola en un colegio electoral. Hay tanto desencanto que el lema «Volem votar!»” ha cambiado por «No volem votar!», pero allí estaremos, cada persona con su voto, cumpliendo la ley, esperando turno. Votaremos distinto, pero sin menospreciarnos ni insultarnos.

¡Ah si nuestros políticos estuvieran a la altura de la gente corriente!