La mala educación

Hoy han hablado de la mala educación en el programa Amigas y conocidas. Se ha perdido el respeto a los profesores. No sé de quién partió la idea de que los alumnos tutearan a sus maestros. Los padres también han visto mermado el debido respeto de los hijos. Y así llegaríamos a todos los niveles de la sociedad.

Los políticos por lo visto, tienen la venia para tratar de cualquier cosa a su adversario. Ha llegado la mala educación a su grado superlativo. Vas en tren y has de rezar para que no te toque viajar al lado de un niño que menos sentarse encima de ti, lo hace todo. Grita, corre, y destroza los nervios de los pasajeros hasta que sus padres le dejan la tableta. A partir de ahí, ya solo tienes un niño quieto con los ojos abiertos y sin pestañear. He visto en algún restaurante que ceden tabletas a los niños para que dejen comer tranquilos a sus padres. De conversación nada de nada.

Los bancos de los paseos sirven para que algunos jóvenes se sienten en su respaldo. Si aquel día toca comer pipas, verán en qué estado queda el alrededor del banco. Por no hablar de los chicles, que deberían pagar un plus por lo que cuesta después limpiar las pegajosas muestras que dejan en el suelo. Tienen papeleras al lado, pero las ignoran. En fin, la mala educación se ha aposentado en nuestras casas, calles, colegios, lugares públicos, e incluso en programas de TV. Habría que empezar a hacer algo para remediarlo.

Mª Elisa Aragonés Domènech

(Tarragona)