Con eso de los tuits y retuits ya no sé quien trajo a colación una respuesta de Quilón de Esparta a la pregunta de cuáles eran las tres tareas más difíciles de la vida. Quilón, uno de los siete sabios de Grecia, contestó (hace unos 2.600 años): guardar un secreto, emplear bien el tiempo de ocio y soportar la injusticia.
El tuitero de referencia añadió por su cuenta otra gran dificultad: aguantar a los pesimistas.
Contribuyendo a la lista, mi aportación sería: soportar a los irascibles. Ya he contado que, en una sesión parlamentaria, un opositor a Churchill le contestó una vez tan fuera de sí, con el rostro enrojecido y tembloroso, que el primer ministro le replicó: «Su señoría no debería almacenar más irritación de la que pueda contener».