O lo son todas. Es decir, la capitalidad no es el factor eje de una área metropolitana, lo es su vocación de mancomunar los servicios de una área geográfica determinada. Según la definición clásica de «área metropolitana», se trata de entidades locales integradas por los Municipios de grandes aglomeraciones urbanas entre cuyos núcleos de población existan vinculaciones económicas y sociales que hagan necesaria la planificación conjunta y la coordinación de determinados servicios y obras.Para una área metropolitana se necesitan diversos municipios que tengan un interés común: mejorar la vida de sus ciudadanos, ofreciendo un servicio público de calidad. Tras muchos años de batallas de campanario que nos han llevado a un teatro de lo absurdo (la estación del AVE del Camp de Tarragona, es el ejemplo más evidente pero no el único), por fin, una nueva generación de líderes políticos del Camp de Tarragona ha decidido que es hora de ponerse pragmáticos y buscar soluciones reales a los problemas reales.
Todos los municipios son su capital, como lo son los 547.800 habitantes que integran el Camp de Tarragona
Tarragona, Reus, Vila-seca, Salou, Cambrils, Valls, la Diputació de Tarragona, el Consell Comarcal del Tarragonés, el Consell Comarcal del Baix Camp y la propia Generalitat de Catalunya van a impulsar la creación de nuestra área metropolitana. El objetivo del área es evidente: mejorar la mobilidad entre todo el territorio. No es el único, pero es el más urgente. Poner trabas a la celeridad en la creación del área metropolitana es pretender detener el tiempo. Cuestionarse la capitalidad es puro populismo. Obviamente que todos tenemos una capital en nuestro corazón, pero el área metropolitana es un ente que no necesita corazón, necesita eficacia. Todos los municipios que finalmente la integren son su capital, porque, en realidad, la capital somos todos, todos y cada uno de los 547.800 habitantes del Camp de Tarragona que ya no podemos aceptar la pérdida de más tiempo. Pasemos página al debate inútil y pongámonos a trabajar.