En los últimos tiempos han proliferado los incívicos que atentan de una u otra forma contra monumentos, bien sean históricos –como sucedió con aquel joven que pintó un mensaje amoroso dirigido a su novia en las piedras del Coliseo de Roma– o naturales, que forman parte del patrimonio de la humanidad o que son bienes considerados importantes para la comunidad que los alberga y cuida con mimo y orgullo. El último caso que ha trascendido es el de un adolescente de 16 años que ha sido detenido después de que el jueves apareciera talado uno de los árboles más célebres del Reino Unido, un arce sicómoro que había crecido durante unos 300 años junto al Muro de Adriano, levantado por los romanos en el norte de Inglaterra. Se da la circunstancia además de que el ‘Sycamore Gap Tree’ se hizo famoso al aparecer en 1991 en la película protagonizada por Kevin Costner Robin Hood: Príncipe de los Ladrones y se había convertido en un atractivo turístico y en uno de los árboles más fotografiados del país. Bien, pues ese monumento natural que tanto tiempo necesitó para alcanzar su esplendor ha sido derribado en cuestión de minutos por un gracioso que no tenía otra cosa mejor que hacer. Uno no sabe si detrás de este tipo de acciones se halla el desconocimiento de lo que significan las cosas, una ignorancia supina, una alarmante falta de cultura y de empatía, cierta dosis de maldad y de querer hacer daño de forma gratuita, un deseo de fama –aunque sea por un motivo tan triste–, simple tontería o, me temo, una mezcla de todo esto junto, pero la verdad es que da mucha pena que un txotxolo –como dirían en mi pueblo– sin conocimiento haga tanto daño a una comunidad que no sale de su asombro y se siente conmocionada, triste e indignada.
Un incívico tala el ‘árbol de Robin Hood’
29 septiembre 2023 18:28 |
Actualizado a 30 septiembre 2023 14:00
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