Salvando todas las distancias, recientemente hemos vivido la Eurovisión de los museos, en el sentido más positivo de la palabra. El Museu Pau Casals de El Vendrell fue uno de los 50 museos, el único catalán y español, que estuvo nominado al premio Museo Europeo del año 2024. Se trata de un reconocimiento que otorga el European Museum Forum y que premia tanto a la instalación museística como al proyecto de gestión. El sello reconoce la excelencia en la escena museística de Europa, a la vez que fomenta y promueve los procesos innovadores en el panorama internacional de museos. Finalmente, fue el Sámi Museum Siida de Finlandia el que se llevó el trofeo que lo acredita como mejor museo europeo del año, pero el único hecho de estar nominado sitúa –todavía más– al Museu Pau Casals de El Vendrell a la cima del sector a nivel europeo. El equipamiento estaba seleccionado por el nuevo proyecto de renovación museográfica y arquitectónica que se inauguró en junio del 2022. Con esta actualización, buscaba afianzar su apuesta por acercar el legado musical y los valores humanísticos de Casals a las nuevas generaciones, incorporando nuevos elementos y contenidos alrededor de su figura.
Es importante que la gente joven se sienta también cerca de la actividad cultural en su más amplio sentido. Ayer, el Pau Casals participó en la Nit dels Museus junto a muchos otros equipamientos, una jornada ideada precisamente para acercar las joyas que albergan todos ellos a la ciudadanía, que a menudo vive alejada de esa realidad. Una iniciativa popular, cultural y de promoción que ayuda a poner en valor el patrimonio que custodian nuestros museos. El Pau Casals ha llegado aquí en un momento dulce. Es bueno aprovecharlo.