El 'boom' del ocio nocturno se frena en Reus

¿Quién habría dicho quince años atrás que Reus se convertiría en referente del ocio nocturno? No estaba de moda y los jóvenes de la época tenían que desplazarse, coger el coche o el autobús e ir a buscar fuera lo que no tenían en casa. Pero hace una década que todo cambió. Varios emprendedores de una misma generación decidieron motivar un cambio de rumbo y dejar claro que Reus tenía algo más que decir en este sector. Empezó lo que se conoció como ‘boom’ del ocio nocturno. Pilée, Call, Absenta, Blondie o Estraperlo son algunos de los nombres que aparecieron en aquella época, revolucionando el sector, y que una década después continúan al pie del cañón.

Esteve Bergadà está al frente de Pilée desde el primer día, el 11 de febrero de 2007. «La ciudad necesitaba un cambio. Había oferta pero tenía muchas carencias, y los jóvenes de entonces lo veíamos muy claro. Fuimos varios, de una misma generación, los que tuvimos la idea y decidimos montar nuestro propio negocio», explica, a apenas unos días de celebrar el décimo aniversario del local de la calle del Vilar.


Optimismo
Bergadà ve con optimismo que la oferta en la ciudad es muy amplia, y está convencido de que Reus tiene un liderazgo indiscutible en la provincia. «Pero no todo ha sido fácil», puntualiza el empresario, con los pies en el suelo. De hecho, recuerda como una época especialmente dura, por ejemplo, cuando nacieron algunos de sus grandes competidores como Soldenit o Drums. Fue un cambio importante. «Hemos pasado épocas difíciles, sobre todo en 2011 y 2012», confiesa. En todo este tiempo también ha habido varios locales que han cerrado. Pero el sector, en líneas generales, se ha consolidado. «Ahora Reus está muy en forma, sobre todo por la combinación de restauración y ocio nocturno», dice el propietario del Pilée.

Roger Elias, dueño del Absenta, local que abrió puertas en 2006, tiene muy claro que hace diez años «el mercado del ocio nocturno hasta altas horas de la madrugada estaba cubierto con el Suau y La Fábrica, pero faltaban locales que ofreciesen la posibilidad de tomar algo y escuchar música en un horario más temprano. Vimos que la gente se iba a Tarragona y a Salou y decidimos ofrecerles la posibilidad de quedarse en Reus».

Además, uno de los aspectos clave que también ayudaron en su día a que la gente se moviese menos de Reus «fue la llegada de los Mossos y la intensificación de los controles de alcoholemia», comenta Elias, quien añade que «la gente empezó a coger menos el coche para salir de fiesta», un detalle que también destaca Daniel Alonso, propietario del Estraperlo. Este local abrió en septiembre de 2008 «porque la gente se iba a Tarragona o Salou porque en Reus no había nada. Estaba claro que había demanda pero no oferta».

Tanto Alonso como Elías coinciden en que la oferta de ocio nocturno en la ciudad ha tocado techo. «La oferta está compensada, porque hay donde elegir. Creo que con lo que tenemos hay suficiente para no sobresaturar el mercado. Tenemos que estar satisfechos con lo que tenemos porque a la gente le gusta moverse de local en local y probar un poco de todo, algo que en Reus se puede hacer», comenta Daniel Alonso.


Oferta equilibrada
Por su parte, Roger Elias define la oferta de ocio nocturno en la ciudad como «equilibrada. La gran competencia que hay nos obliga a todos a esforzarnos para mejorar y esto ha contribuido a que tengamos una oferta de calidad, con buena acústica en los locales, buena programación musical, etc.». No obstante, el propietario del Absenta tiene claro que la apertura de locales «no irá a más, porque la gente es la que es y la ciudad también».

Con la oferta plenamente consolidada ahora toca «seguir trabajando para intentar mejorar y que la gente tenga un motivo para salir de noche de su casa para tomarse algo. El ‘boom’ ya ha pasado pero tenemos que seguir trabajando duro», sentencia Elias.

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