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Comienza el curso 2019-2020 con la modificación de los horarios en el transporte municipal. Este año, cuatro líneas se han visto especialmente afectadas. Son la L60, la L11, la L20 y L2, que ayer mismo entraron en funcionamiento generando todo tipo de opiniones entre vecinos y usuarios. Una de las que más discrepancias levantó fue la L60, que recorre la ciudad desde la plaza del Nen de les Oques hasta el Hospital Sant Joan. Y es que, a pesar de añadir dos nuevas paradas – una frente la biblioteca municipal Pere Anguera y otra en la plaza Marià Manent–, también se han eliminado otras dos en la calle Maria Aurèlia Capmany. Una decisión que los viajeros no comprenden.
«Hablamos con el ayuntamiento y les dijimos que con una parada en esta calle era suficiente. También les propusimos que la línea 60 podría llegar a la biblioteca Pere Anguera y a la urbanización Mercader», explica Jordi Balust, vecino de Mas Iglesas. Desde el consistorio, añade, les hicieron caso a medias, ya que han terminado eliminando las dos paradas de la calle Maria Aurèlia Capmany. «Nadie nos ha avisado. Nos hemos enterado por la prensa», manifiesta Balust.
Alberto Artiga es uno de los usuarios que solía coger la línea 60 desde el Hospital Sant Joan para ir al ambulatorio. No obstante, ayer se encontró el cambio de sopetón y tuvo que improvisar. Por este motivo decidió bajarse en la nueva parada biblioteca Pere Anguera. «Tendré que andar un poquito más, pero está muy bien porqué así la línea dará más servicio a la juventud», argumentaba. Artiga también reconocía que no tenía claro si se han producido más cambios en la línea de autobús pero, en líneas generales, se mostraba satisfecho con el funcionamiento de los buses de Reus Transport.
La línea 60 también se ha visto modificada con la parada Escola Eduard Toda 1, que se ha desplazado unos metros. Esto implicará poca molestia para a los usuarios que quieran ir al hospital. Los que quieran ir al centro de la ciudad, sin embargo, deberán coger el autobús en la biblioteca. Reus Mobilitat i Serveis explicaba en su día que esta modificación se había tomado queriendo dar más movilidad a una de las rutas.
En la calle Sant Bernat Calbó, ayer aún se veía el anuncio de las obras por la construcción de una de las nuevas paradas, en concreto la más cercana en el santuario de la Mare de Déu de Misericòrdia. En esta carretera se han añadido dos puntos de autobús para dar mejor servicio a la Fundación Alzheimer Rosa Maria Vivar y que afectarán a la línea 20 (barrio San José - barrio Immaculada) y línea 21 (Sant Bernat Calvó - Hospital).
Ramon Palmerin, presidente de la Asociación de Vecinos de Misericòrdia se mostraba satisfecho con estas dos nuevas paradas, aunque considera que no eran necesarias: «El barrio ya está muy bien conectado. Al tener la arteria de la avenida Països Catalans el transporte público va muy bien servido. No eran imprescindibles, pero toda mejora es buena».
El servicio de transporte urbano de la ciudad también ha modificado la línea 11, que va desde la plaza de la Llibertat hasta el barrio Montserrat. En este caso, se incorpora una parada nueva en la calle Vidal y Barraquer 1 dirección Gansos. Estos cambios no modifican ningún horario.
Para terminar, destacar que la línea 50, que conecta Reus con el Aeropuerto, reducía desde ayer la frecuencia de paso para recuperar la que tenia en junio, antes del verano.
