La antigua Escola d’Art de Reus será reformada por 1,7 millones

La planta baja del edificio que antiguamente acogía la Escola d’Art i Disseny de la Diputació de Tarragona –en el paseo de la Boca de la Mina de Reus– será reformada en los próximos meses por un valor de adjudicación de 1.764.388,87 euros. El objetivo es transformarlo en un centro de formación, que centralice todas las actividades formativas que ofrece el ente supracomarcal. Actualmente, esta oferta se realiza en distintos puntos: en aulas de formación que la Diputació dispone en un local de alquiler en la Vall de l’Arrabassada de Tarragona, así como aulas adaptadas en el edificio del Palau y en el edificio Síntesi. Además, en la antigua Escola d’Art i Disseny de Reus ya hay aulas destinadas a formación Dual Tic y, recientemente, se ha adecuado una aula para realizar Crowd Working. Ahora, con esta actuación, todas estas actividades quedarán concentradas en un único edificio. Esto permitirá «prescindir del alquiler del local de la Vall de l’Arrabassada, liberar espacio en otros edificios y mejorar la gestión de las actividades formativas», según se describe en la memoria del proyecto. Así, también se aprovecha un espacio que está prácticamente en desuso. Fue en 2016 que la Escola d’Art se trasladó en la calle del Vent.

Los trabajos permitirán reordenar un espacio que desde 2016 está prácticamente en desuso

Los trabajos se concentran en la planta baja del edificio ubicado en el paseo de la Boca de la Mina. En concreto, se actuará en 1.799,05 metros cuadrados y en 1.017,55 más de espacios exteriores. Se prevén cinco grandes zonas de actuación: administración y zonas comunes; zona de servicios y aulas polivalentes; zona de formación SAM, formada por cuatro aulas y un almacén. También habrá una zona de Crowd Working (espacios para que jóvenes emprendedores puedan hacer crecer o madurar un proyecto), con un único espacio con zona de formación y trabajo, zona de descanso y otra de office; y otra de formación Dual-Tic, formada por cuatro aulas, un despacho y un bloque de servicios.

Más allá de la reorganización de la planta baja del edificio, también se actuará en la cubierta. Actualmente, al no haber canal de recogida de aguas pluviales, el agua cae directamente de la cubierta al suelo, lo que ha propiciado que parte de la fachada se haya ensuciado y cubierto de hongos. Para solucionar esta problemática, se propone replantear el diseño de la cubierta, instalando un canal perimetral que recoja la lluvia, además de eliminar las tejas. Por otro lado, se reordenará también la zona de acceso, con una nueva rampa que se adapte a la normativa actual.