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El Ayuntamiento, a través de la empresa Reus Mobilitat i Serveis, abrió en verano del año pasado un periodo de consulta para tratar la viabilidad del proyecto de construcción del nuevo Mercat del Carrilet. La intención era conocer la opinión de los súpers y su interés para levantar y gestionar el nuevo equipamiento. Pasados los meses, el interés que suscita el equipamiento ha obligado al consistorio a tener que prorrogar el plazo unos meses más para terminar las reuniones «con más operadores económicos que puedan estar interesados en participar de la futura licitación».
Según recoge el perfil del contratante de la sociedad municipal, con fecha del pasado 28 de febrero, se trata de un segundo aplazamiento que terminará el próximo mes de junio. La concejal responsable de Reus Mobilitat i Serveis, Montserrat Caelles, asegura que la voluntad de construir un nuevo Mercat del Carrilet es firme y que los contactos realizados están siendo positivos. También añade que la mayoría de paradistas ve con buenos ojos el proyecto.
De hecho, en unos tres meses finaliza el periodo de concesión que tenían los dueños de las paradas. Ante esta situación, y con la construcción del nuevo equipamiento todavía en una fase embrionaria, desde el consistorio se ha planteado a los paradistas la posibilidad de firmar un contrato de arrendamiento de dos años de duración. Una propuesta, subraya Caelles, que ha contado con un amplio consenso y que garantiza la actividad del Mercat del Carrilet.
La opinión recogida entre los paradistas es satisfactoria en lo referente a la construcción de un nuevo mercado, aunque ven la situación con cierta inseguridad «¿Qué pasará tras los dos años? No sabemos nada», explica Mercè Domínguez, desde Fruita Casa. En su caso, asegura que el negocio funciona bien. «Somos productores, tenemos productos de proximidad y nos funciona. Nuestra intención es poder seguir, pero de momento, 2 años», añade.
Desde Pescados Toni Ortiz, la intención es también seguir en el Mercat del Carrilet, «pero veo poco futuro, la verdad», opina Juan, mientras señala su entorno y subraya que hay poca clientela. «Hay 78 grandes superficies en la ciudad. Reus está saturado», opina, al mismo tiempo que se pregunta si habrá muchas paradas que quieran seguir.
En lo que también coinciden todos los paradistas es en la necesidad de hacer una reforma del entorno del mercado, apunta Isabel Besora, quien considera que por fuera, las instalaciones son «horrorosas». «Hace falta una mejora y, por ejemplo, que cada parada sea más espaciosa, porque ahora son muy pequeñas y casi no hay espacio para trabajar», añade. Desde La Tartana, el bar del Mercat del Carrilet, Isabel Matías hace justo una semana que regenta el negocio, y tiene sus esperanzas puestas en el futuro del equipamiento.
