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Una nueva forma de interactuar gracias a la aplicación de las tecnologías de última generación. Bajo esta premisa presentó ayer Taller Baix Camp un nuevo equipamiento multisensorial con la finalidad de mejorar la calidad de vida de los usuarios de la residencia Masia Roig de Reus. La máxima es estimular todos y cada uno de los sentidos. La sala, creada por la empresa reusense DOIT Sistemas Sensoriales, está equipada con diferentes elementos como un proyector, un equipo de sonido, una cama de agua, una columna de burbujas, un sistema de cambio de olores y, en el suelo, una superficie viva para poder interaccionar también. No hay rincón que escape a la generación de estímulos.
«La instalación se puso en funcionamiento de forma reciente. Hará mes y medio. Significa completar una apuesta de mejora en el servicio que brindamos a los usuarios», explicó el director general de Taller Baix Camp, Josep Ramon Nogués. Y es que la principal variable con la que se encuentran es que el índice de envejecimiento de los usuarios es cada vez mayor. «El nuevo espacio supone una solución y una respuesta a esta nueva y creciente realidad», completó. Este proyecto ha visto la luz, además, gracias a un gesto solidario en el que se ha implicado mucha gente. La Fundació Roviralta ha aportado 8.000 euros; y Obra Social ‘la Caixa’, 9.000.
«Hemos incluido lo recaudado en nuestra primera caminada solidaria, donde obtuvimos unos 6.000 euros. A esto lo que hemos añadido más recursos propios para conseguir este equipamiento», continuó Nogués. La instalación, asciende a los 30.000 euros en total. «El espacio inteligente permite que los usuarios con discapacidad intelectual profunda experimenten sensorialmente y de acuerdo a las necesidades que tengan. Es decir, en cada una de las sesiones, que son individuales y personalizadas, habrá que cumplir unos objetivos. De eso, se encarga una terapeuta ocupacional especializada en integración sensorial en un espacio totalmente controlado», aportó la directora técnica de Taller Baix Camp, Mónica López. Cada sesión es de 15 a 20 minutos. De hecho, el/la responsable de dirigir la sesión dispone de una tableta en la que puede cambiar intensidades, accionar y desconectar los diferentes elementos de la sala.
Buenos resultados
La llegada de este equipamiento ha supuesto para el equipo de trabajadores de Taller Baix Camp todo un hallazgo. Hasta el momento han obtenido buenos resultados, «diferentes de los que hemos tenido hasta ahora», aseguraron. Y es que la sala multisensorial consigue interpelar a cada uno de los usuarios de una forma más directa. «Llega a dónde nosotros, con otras actividades más convencionales, no llegábamos. Es una gran alternativa para poder sorprender con otro tipo de actividades», resuelve López.
Puso ejemplos. «Personas que, por lo general, se muestran más pasivas, vemos que se vuelven más receptivas. Toman cierta iniciativa a través de elementos que las hacen reaccionar de una forma más sensitiva», resumió la directora técnica de la entidad. Tatiana Caro, de Obra Social ‘la Caixa’, dijo que la principal finalidad de la fundación radica en «luchar por mejorar la vida de las personas en riesgo de exclusión social» y añadió que recibieron numerosas donaciones en el crowdfunding que ha contribuido para con la causa.
