La emblemática tienda Zara del Raval de Jesús cesará la actividad comercial el mes que viene coincidiendo con la apertura de La Fira Centre Comercial. Y no lo hará sola. El grupo Inditex también cerrará dos líneas de negocio más. Serán las firmas Bershka y Pull&Bear, situadas en la céntrica calle Monterols. La decisión dejará los tres locales vacíos, ya que la presencia del grupo es en régimen de alquiler. Esto es así porque la estrategia empresarial – confirman desde el gigante textil – no pasa por abrir ningún otro negocio que no sean los que ya están proyectados en el complejo comercial del Parc Sant Jordi.
La noticia confirma los peores temores que tenía el comercio local sobre la fuga de franquicias del centro de la ciudad a causa del ‘efecto Metrovacesa’. Tal y como recogía el Diari hace unos meses, el sector daba por hecho que las empresas apostarían por La Fira y no duplicarían sus marcas. Así es que, una vez confirmada la marcha de las principales firmas del grupo Inditex, los comerciantes ven con preocupación el futuro del modelo imperante en Reus desde hace años. Y es que todos coinciden a la hora de señalar la progresiva pérdida de activos que sufre el centro de la ciudad.
Especialmente significativo es el caso de Zara, un negocio con amplio recorrido en Reus y que siempre ha generado un impacto muy relevante en el sector. Sin formar parte de las dos principales arterias comerciales de la ciudad –calles Monterols y Llovera–, el Raval de Jesús cimentaba parte de su reclamo a la conocida firma del grupo Inditex. El inquilino que ocupará el amplio local que queda libre es, en estos momentos, una gran incógnita. Tampoco existe respuesta sobre el impacto que tendrán las últimas informaciones sobre el precio del alquiler de los locales. Según fuentes consultadas de inmobiliarias, la percepción es que una posible pérdida de interés siempre está relacionada con un descenso de los alquileres, sobre todo en un mercado tan complejo y volátil como es el del sector comercial.
Apuesta por La Fira
La desaparición de Zara, Pull&Bear y Bershka del centro de la ciudad son una muestra fehaciente de que el grupo Inditex apuesta de forma decidida por el complejo del Parc Sant Jordi. Asimismo, cabe destacar que la empresa mantendrá, de momento, las otras marcas que tiene en funcionamiento como, por ejemplo, Stradivarius en la Raval Santa Anna o Massimo Dutti en la calle Llovera.
Desde el Ayuntamiento de Reus declinan posicionarse al respecto del cierre de negocios correspondientes a operadores privados. Aún así, fuentes municipales recuerdan que se está trabajando en la elaboración y puesta en marcha del Pla Estratègic de Comerç i Turisme de Reus, elaborado por la Universitat Rovira i Virgili (URV), junto con las distintas entidades comerciales. Éste, contempla un conjunto de actuaciones en el ámbito comercial, turístico y de la restauración con el fin de mitigar los efectos de la apertura del centro comercial de Metrovacesa.
Según anunciaron desde la propia promotora e inmobiliaria madrileña, el edifico abrirá puertas el próximo viernes 6 de noviembre con cerca de un centenar de tiendas.