Un ladrón de 33 años y vecino de Vila-seca fue detenido en la noche del lunes 28 de abril en pleno apagón nacional en Cambrils.
Dos vecinos, uno de ellos agente de los Mossos d’Esquadra, alcanzaron al delincuente cuando huía a la carrera por la calle Joan Bardina.
Antes, sin embargo, había forzado varias viviendas del barrio del Molí de la Torre y había agredido al policía cuando este lo descubrió en plena acción. Con la ayuda de la Policía Local, el detenido terminó en la comisaría de los Mossos de Cambrils, acusado de un delito de robo con fuerza y otro de atentado a la autoridad.
Los hechos se conocieron poco antes de las 22 horas del lunes, en las últimas horas del apagón nacional que afectó a España y Portugal. En el barrio del Molí de la Torre, un vecino observó cómo un hombre con una linterna estaba agazapado cerca de una puerta con actitud sospechosa. Este vecino es un agente de los Mossos que el lunes estaba de descanso.
El agente se acercó al hombre y se identificó como policía. El sospechoso no dudó en salir a la carrera por la parte trasera de las viviendas en busca de una vía de escape. El agente persiguió al sujeto, que tenía una palanca y una linterna.
En una de las vallas divisorias de las propiedades, el mosso dio alcance al ladrón, que lo cogió por la pernera. El sujeto dio una patada al policía en la cara y logró desengancharse del agente.
Sin embargo, en la huida, el ladrón tropezó y cayó de bruces en la calle, y otro de los vecinos del Molí de la Torre llegó hasta el ladrón y lo retuvo hasta que recibió la ayuda del vecino policía.
Se pudo llamar a la Policía Local de Cambrils, que se presentó con el coche logotipado y se encargó de llevar al detenido hasta la comisaría de Cambrils. El acusado había realizado daños en diferentes puertas, pero no habría alcanzado el objetivo de entrar en ninguna de las viviendas aprovechando la oscuridad y la ausencia de alarmas activadas.