Turisme dará la mitad de su superávit al Ayuntamiento

El Patronat Municipal de Turisme renunciará a la mitad de su superávit de 2021 y cederá 341.461 euros para cubrir «necesidades» generales del Ayuntamiento de Tarragona. Así lo aprobó ayer el Consell Rector del ente local, en una votación que contó con el apoyo del gobierno de la Plaça de la Font (ERC-Junts per Tarragona-CUP), la oposición de PSC, Cs y PP y la ausencia de En Comú Podem.

Según los números de 2021, el organismo dependiente de la corporación municipal obtuvo el año pasado un remanente de tesorería de 752.814 euros sobre un presupuesto inicial de 1.184.800 euros que, tras las modificaciones de crédito, acabó en 1.639.764. Se trata, pues, de un excedente muy alto que –contradictoriamente– choca con la delicada situación por la que pasan las debilitadas arcas de la Casa Gran, que desde el pasado 1 de enero gestiona el día a día con un presupuesto prorrogado de 2021 al que esta primavera solo se ha podido aportar la mitad del superávit del año anterior: 5,4 millones de euros.

Con este escenario, con un Patronat en una buena situación económica y un Ayuntamiento en claro desequilibrio, el dilema está claro: ¿el sobrante de Turisme debe quedarse en el propio Patronat de Turisme o, al contrario, debe ayudar a poner «parches» para que el conjunto de la administración pueda ir tirando?

«Al mismo nivel que en 2019»

El alcalde y presidente del Patronat Municipal de Turisme, Pau Ricomà (ERC), lo tiene claro. «A lo largo de los dos últimos años, por la pandemia, hemos arrastrado un remanente importante porque han habido actividades que no se han realizado, como es Tarragona Ciutat de Castells», explica el máximo representante municipal, quien recalca que, ahora, el ente municipal apuesta por ceder el 45% de su superávit porque «tenemos muchas necesidades».

El edil de ERC indica, esto sí, que la cesión de este dinero «no nos obligará a dejar de hacer nada de lo que tenemos previsto, sino que lo haremos todo», resaltando que «estamos trabajando muy bien, con mucho dinamismo». En este sentido, el presidente del Patronat afirma que «estamos en los mismos números que en 2019».

Martín: «Es preocupante»

De manera diametralmente diferente ven las cosas PP y PSC. Los primeros, que presidieron el Patronat entre 2016 y 2019, consideran que es «preocupante» la «flagrante ineficacia y dejadez del gobierno municipal», según indica el portavoz de la formación conservadora, José Luis Martín, quien añade: «No solo deja un presupuesto que únicamente permite cubrir las nóminas sin ningún margen para gasto en promoción, sino que es incapaz de incorporar 300.000 euros en un año en el que todas las destinaciones están poniendo los máximos recursos en reforzar un sector que debe recuperarse y del que dependen tantos otros, como la restauración y el comercio», afirma el líder popular. Martín añade, además, que «la estrategia actual de Turisme está orientada a una gestión y una estrategia invisible, de inversión cero y de renunciar a nuestra capitalidad. Ricomà será recordado por su incapacidad».

Por su parte, el concejal del PSC Berni Álvarez también se muestra crítico con la renuncia a la mitad del superávit del año pasado. «Tras la paralización por la Covid y el caos que supuso estar tanto tiempo sin gerente, ahora no es el momento de renunciar a estos 341.000 euros», indica el edil socialista, quien pide «apostar y dar un empuje al sector con un incremento en el trabajo de promoción». Asimismo, Álvarez lamenta que «en el pleno se nos dijo que todo el remanente de 2021 se quedaría en el Patronat, pero una vez más parece que han cambiado de opinión». Todo es, pues, cuestión de prioridades. Y a las puertas del último verano antes de las Municipales de 2023, aún más.