Concentración de Volkswagen escarabajo en Tarragona

Pere Martí puede decir algo al alcance de muy pocos: hoy sigue moviéndose en el primer coche de su vida, un Volkswagen escarabajo del 1958 que él compró en el 78, dos décadas después de que saliera de la fábrica.

Es una de tantas historias detrás de un modelo que, como reconoce, «arranca una sonrisa a quien te ve por la carretera».
Martí es responsable de organización de actividades de la Associació Amics del VW de Catalunya. La entidad, que tiene 35 años y cuenta con socios de todo el territorio, organiza para este sábado su primera concentración de coches Volkswagen clásicos con motor refrigerado por aire en Tarragona. Se trata, sobre todo, de los populares escarabajos, pero también de otros modelos como las furgonetas T1 y T2, que se han convertido, dentro del imaginario colectivo, en el vehículo de los hippies y en icono publicitario.

Los vehículos, unos 25 en esta oportunidad, quedarán expuestos en la Plaça Verdaguer desde las nueve de la mañana hasta la una de la tarde. Mientras, los dueños harán un recorrido por la Tarragona Romana y comerán en la Platja Llarga.  
Pero si la historia de Martí es curiosa, hay otras que no lo son menos. En la asociación hay dueños de coches de todas las edades y no importa el grado de conservación de los vehículos. De hecho, apunta Martí, hay todo un mundo alrededor en lo que se refiere a reparaciones y repuestos.

Cada coche, una historia

Uno de los socios más jóvenes de la entidad tiene 21 años y se enteró de que su abuelo había tenido un escarabajo en el 54. El chico investigó y consiguió dar con el coche en un desguace. Consiguió restaurarlo completamente y, cómo no, mostrárselo a su abuelo.

A la concentración de Tarragona vendrán, sobre todo, escarabajos (los más antiguos del 54 y del 58) y furgonetas T1 y T2.
Hay que aclarar, eso sí, que la asociación acoge a dueños del modelo clásico. El mismo comenzó a producirse en los años 30 gracias, en buena parte, al empeño de Adolf Hitler. La propaganda nazi quería llegar al mundo del automóvil y presentar su «Volksauto» (coche del pueblo).

De dicho modelo original el último coche salió de una fábrica de Puebla, en México, en el año 2003. 
Posteriormente Volkswagen siguió sacando modelos más modernos inspirados en el escarabajo, pero estos últimos se dejarán de fabricar justo en este mes, según el anuncio que hiciera Volkswagen el año pasado.

Para los nostálgicos, la página de la asociación www.avwc.org ofrece un amplio repaso por todos los modelos clásicos y su historia. No obstante, si de lo que se trata es de verlos personalmente, probablemente cada vez más toque recurrir a concentraciones como la de este sábado o la que cada año hacen en Tossa de Mar, la más grande de la península ibérica.