La Junta de Govern Local del Ayuntamiento de Tarragona –formada por PSC, PP y Unió Democràtica– ha acordado este jueves ordenar a la empresa Annunzia Publicidad Exterior SL que, en el plazo de un mes, derribe el tótem publicitario instalado en el barrio de Parc Riuclar. En este sentido, el Ayuntamiento notifica a la compañía que debe dejar el terreno «en el estado en el que se encontraba antes de la comisión de la infracción», ya que el pasado 22 de febrero el Consistorio denegó a la compañía la legalización de la instalación.
Asimismo, el gobierno municipal insta a la propiedad del espacio para que, en el plazo de tres días desde la recepción de la notificación, «desconecte la iluminación y tape la publicidad mientras no se derribe el tótem publicitario». La resolución municipal advierte a los gestores del espacio que la ordenanza municipal prevé sanciones de hasta tres mil euros, «o bien la ejecución subsidiaria por parte del Ayuntamiento, a cargo del interesado».
Por su parte, el administrador de la compañía Annunzia, Ricard Monge, tiene claro de que la firma llegará hasta el final para mantener la instalación. «Lo tenemos claro, no hemos cometido ninguna ilegalidad, y así lo demostraremos ante el juez si es necesario», ha remarcado durante los últimos días.